_
_
_
_
_
Crónica:
Crónica
Texto informativo con interpretación

Pearl Jam resucita el 'grunge' en un concierto retrospectivo

La banda estadounidense deleitó al público, que llenaba el Palacio de los Deportes de Madrid, durante dos horas

La banda estadounidense Pearl Jam sedujo anoche al público madrileño con armas del pasado en un recital que recogió grandes temas del grunge como Not for you o Black, pero que cojeó en los momentos en los que el grupo liderado por Eddie Vedder se abrió a los temas de su último y homónimo álbum.

Pearl Jam devolvió anoche el esplendor al grunge y demostró la actualidad de sus grandes clásicos que sonaron frescos y vibrantes, cuando la banda cumple quince años de carrera, y fueron acogidos con gran entusiasmo por un público que había agotado las localidades del Palacio de los Deportes de Madrid.

Eddie Vedder lideró en el escenario al grupo que completan Mike McCread, Stone Grossard, Jeff Ament y Matt Cameron, durante más de dos horas de recital en las que tocaron un total de 26 temas, incluidos homenajes a sus referentes Pink Floyd, del que tocaron algunos acordes de The Wall, y Jimmy Hendrix, cuyo tema, Little Wing, reversionaron para cerrar el concierto.

Más información
Kurt Cobain destrona a Elvis Presley como el muerto más rico

La banda de Seattle, que contabiliza 60 millones de discos en ventas y a pesar de demostrar la repercusión que todavía hoy tienen sus temas de discos como Ten o Vs, de principios de los noventa, dejo más frío al público con sus composiciones más recientes, como Inside Job o World Wide Suicide, pertenecientes al disco más reciente de la banda de Seattle, y que sonaron, sin embargo, mucho más anacrónicas.

'Vitalogy'

La banda que mantuvo la dignidad del grunge cuando quedó huérfano tras la muerte de Kurt Cobain y que decidió dejar de rodar videoclips como protesta contra la MTV, optó, por tanto, por hacer concesiones a la nostalgia y dejar que fuera la audiencia la primera que cantase las primeras líneas de Better Man, la canción de su disco Vitalogy con la que abrieron el recital.

En el primer bloque, en el que desplegaron toda la fuerza de su rock, la potencia de su vocalista y el buen sonido de sus guitarras eléctricas, se sucedieron canciones como Given to fly, Daughter o Not for you, que contentaron a un público con el que Eddie Vedder se resistía a interactuar.

Después de un primer descanso, tras hora y cuarto de un concierto impecable musicalmente pero sobrio y anticuado en la parte estética, Eddie Vedder volvió al escenario con su banda para dar cabida a sus baladas más sobrias, de ritmos más pausados, como Black o Man of the hour, que compusieron para la película Big Fish, y fue entonces cuando se abrió a la audiencia a través de mensajes de paz y esforzándose por hablar en castellano.

En esta segunda parte, que se abrió con Unemployable, de su último disco, Vedder consiguió con su ductilidad vocal transmitir emoción a los presentes y demostrar, subiendo y bajando octavas con una facilidad pasmosa, por qué fue una de las voces más elogiadas de los noventa.

Sin embago, para redondear su actuación, Pearl Jam volvió a los ritmos duros con su último single, World Wide Suicide y el tema de Neil Young & Crazy Horse, Keep on rockin' in the free world.

El cantante de Pearl Jam, Eddie Vedder,  durante su actuación ayer noche en el Palacio de Deportes de Madrid.
El cantante de Pearl Jam, Eddie Vedder, durante su actuación ayer noche en el Palacio de Deportes de Madrid.EFE
Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_