El Sónar se desdobla
El festival barcelonés encuentra una segunda sede en A Coruña coincidiendo con el Xacobeo 2010
Y el primero fue el Sónar. Tras la debacle del Summercase, el único festival español de verano con doble sede, que desapareció en 2008 después de tres ediciones, se llevaba mucho tiempo especulando sobre cual sería el certamen que daría un paso que parecía inevitable. Para aumentar su rentabilidad los festivales españoles hace años que buscaban otras sedes, pero hasta ahora todos los intentos habían quedado en nada.
Vince Power, el dueño del FIB Heineken, aventuró la primavera pasada en una entrevista a una web británica que este año se produciría el desdoblamiento de ese certamen e incluso sugirió un lugar como sede gemela: "Sevilla es la nueva Barcelona", decía en una frase memorable. Pero a día de hoy no existe confirmación de este hecho.
Al final ha sido el Sónar barcelonés, el Festival de Arte Multimedia y música avanzada el que para su edición número 17 ha tomado la iniciativa. A Coruña, acogerá Sónar Galicia exactamente en las mismas fechas 17,18 y 19 de junio y con la doble estructura, Sónar de día y de noche, que ha popularizado el certamen madre. Se trata de un hecho puntual, Sónar Galicia se realiza con la colaboración del gobierno gallego dentro de los actos previstos para el Xacobeo 2010, y según Gustavo Sánchez, responsable de prensa del festival no está previsto que esta colaboración se prolongue en 2011.
Los espacios dónde se celebrará el festival en A Coruña están todavía por concretar. Con respecto al cartel tampoco se ha avanzado ningún nombre. "En su mayoría los artistas serán los mismos, aunque siempre hay un margen para la excepción si alguno no puede acudir a ambas sedes", dice Sánchez, "aunque en la programación del certamen de A Coruña, predominarán los nombres gallegos".
La imagen gráfica de Sónar, uno de sus puntos fuertes, se vinculará a Galicia y tomará forma de largometraje. "La película se titula Finisterre y estará estructurada en seis capítulos y un epílogo. Se trata de un viaje de introspección de dos fantasmas que, en Sónar 2009, decidieron hacer el Camino de Santiago hasta el fin del mundo para, una vez allí, comenzar una nueva etapa terrenal y efímera".
