Víctor García de la Concha, Premio Internacional Menéndez Pelayo

Víctor García de la Concha estaba esta tarde discutiendo términos de economía en la comisión delegada de la Real Academia Española cuando recibió la noticia de que acababa de ganar por unanimidad el Premio Internacional Menéndez Pelayo. Dotado con 48.000 euros -aportados por la Fundación Cervantina de México- y la medalla de honor de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo -que el filólogo recibirá este verano en Santander-, el galardón viene a reconocer la contribución de García de la Concha a la política lingüística panhispánica desarrollada por la RAE y las academias de la lengua de América y Filipinas.

"Tengo muy claro que el premio, aunque me lo dan a mí, corresponde a toda la gente que ha trabajado conmigo", ha dicho a este diario el actual director honorario de la Real Academia Española, institución en la que ejerció como director durante 12 años, hasta que en diciembre pasado fue relevado en el cargo por José Manuel Blecua. Durante su mandato, De la Concha desarrolló una labor de integración de todas las academias entre cuyos resultados más tangibles se encuentran el Diccionario Panhispánico de Dudas, la Nueva Gramática, el Diccionario de Americanismos y la Ortografía.

García de la Concha -nacido en Villaviciosa, Asturias, en 1934- insiste en que no hizo más que cumplir con un mandato de su antecesor, Fernando Lázaro Carreter, que recibió el Premio Internacional Menéndez Pelayo en 1994. Hoy sus nombres se unen en el palmarés de un galardón del que forman parte también los Nobel Octavio Paz y Mario Vargas Llosa y personalidades como Carlos Fuentes, Mario Benedetti o Francisco Rico.

El subrayado carácter global de la labor del premiado de este año hace que solo en parte se haya roto la regla no escrita por la que los ganadores españoles se alternan con los latinoamericanos. El último laureado había sido José Luis Sampedro. Del jurado que ha distinguido a García de la Concha han formado parte, entre otros, Salvador Ordóñez, rector de la UIMP; Javier Garciadiego, presidente y director general de El Colegio de México; Ignacio Polanco, presidente del grupo PRISA (editor de EL PAÍS), y Ana Sara Ferrer, presidenta de la Fundación Cervantina de México. La labor de Eulalio Ferrer, padre de esta última, "fue decisiva para que México abrazara la política panhispánica", subraya García de la Concha, consciente del peso que en el territorio de La Mancha tiene el país con más hispanohablantes del planeta.