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El jazz regresa al Renacimiento

El saxofonista Andreas Prittwitz despliega su mezcla de músicas en Madrid y prepara un nuevo disco

Aurora Intxausti

Sonidos que emergen de la fusión del jazz y el blues llenan cada noche el recinto del Café Central de Madrid. Músicas que se empastan con habilidad hasta lograr que el blues se aproxime lo más posible a la improvisación. Andreas Prittwitz (Múnich, 1960), alemán afincado en España desde hace 30 años, lo logra cada noche en ese recinto madrileño que lleva 25 años programando música en directo. Él ha conseguido ser un asiduo. El saxofonista compagina así el trabajo en vivo con uno de sus grandes proyectos: mezclar música antigua y moderna.

Los conciertos de Pritt & Simon, con Luis Fernández (órgano), Javier Saiz (bajo) y Antonio Calero (batería), se prolongarán hasta mañana en el Café Central. Posteriormente actuará junto al cantautor Javier Krahe, que interpretará las canciones de su nuevo disco con toda su banda. En paralelo, el saxofonista prepara la salida de su próximo álbum, Looking back over renaissance, que saldrá a la venta en enero y en el que intervienen Laura Salinas (viola de gamba), Antonio Toledo (guitarra española y barroca, mandola), Sergio Martínez (percusiones) y el propio Prittwitz (flautas de pico, clarinete y saxófono).

Prittwitz, polifacético músico que ha participado en varias películas españolas -entre otras protagonizó El vivo retrato junto a Victoria Vera-, ha colaborado como solista de flauta de pico con diversas orquestas en Europa, y ha puesto en marcha un proyecto basado en la fusión de músicas improvisadas con composiciones originales de la época renacentista. "He mezclado la tímbrica de los instrumentos de la época -guitarras barrocas, flautas de pico, violín, viola de gamba, percusiones- con la sonoridad moderna del saxófono o el clarinete", explica. Se confiesa un arduo defensor de la mezcla de músicas diferentes porque "la cultura occidental está muy agotada de armonías y por eso es necesario adentrarse en sonidos procedentes de otras culturas".

El saxofonista, que estudió música clásica en Friburgo y se especializó en flauta barroca, asegura que "la convivencia de la sonoridad renacentista con la moderna resulta absolutamente natural y nada forzada, consiguiendo un sonido realmente nuevo y sorprendente".

"Provengo del mundo de la música antigua, pero mi trayectoria profesional me ha llevado por otros derroteros, como la colaboración con músicos como José Antonio Ramos, Jorge Pardo, Chano Domínguez, Pedro Ruy Blas, Pedro Iturralde, entre otros", puntualiza el músico.

El proyecto incluye el desarrollo de varios discos en los que habrá una combinación de músicas barroca y clásica con otro tipo de sonidos más modernos. "Durante muchos años las giras con otros músicos y trabajar para otros artistas me ha impedido que me dedique a lo que verdaderamente me gusta. Me he dedicado a la música de otros y no a la mía. Éste es un momento interesante para que aborde proyectos que personalmente me resulten más satisfactorios", explica Prittwitz, que ha renunciado recientemente a participar en una gira con Ana Belén. "Mis músicas son el proyecto de mi vida y a eso es a lo que voy a dedicarme en los próximos años", manifiesta con entusiasmo el artista sabiendo que hasta finales de 2009 estará embarcado en esta aventura. Como productor y músico de sesión, ha trabajado, entre otros, con José Antonio Ramos, Javier Krahe, Joan Manuel Serrat, Víctor Manuel y Ana Belén, Joaquín Sabina, Luis Eduardo Aute, Manolo Tena o Toreros Muertos. Prittwitz tiene editada una docena de discos de música new age.

El músico Andreas Prittwitz, ayer en Madrid.
El músico Andreas Prittwitz, ayer en Madrid.gorka lejarcegi
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Sobre la firma

Aurora Intxausti
Coordina la sección de Cultura de Madrid y escribe en EL PAÍS desde 1985. Cree que es difícil encontrar una ciudad más bonita que San Sebastián.

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