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El Atlético de Madrid no podrá jugar en su cancha habitual la semifinal europea

El Atlético de Madrid no podrá jugar su partido de semifinales de Copa de Europa en su cancha habitual, la del polideportivo Antonio Magariños, frente al Dukla de Praga, el rival que ayer le tocó en sorteo. La Federación Internacional de Balonmano (IHF) no tiene homologadas las medidas del campo en el que el Atlético juega sus partidos y el club gestiona que la Comunidad Autónoma de Madrid le ceda el Palacio de los Deportes. El Barcelona, por su parte, se eliminará en la Recopa con el Vikingur de Islandia y el Tecnisa de Alicante, en la Copa de la Federación, con el vencedor de la eliminatoria Sii Zaporoje (URSS)- Zrenjanin (Yugoslavia). Los partidos de vuelta se jugarán los días 30 o 31 de marzo. Baga y Técnica jugarán primero fuera de casa.El Atlético deberá recibir al Dukla de Praga el 16 o 17 de marzo en el primer partido de semifinales de la Copa de Europa. La cancha del Magariños tiene unas medidas de 39X20 metros y la IHF obliga a que los campos donde se disputen partidos internacionales de caracter oficial tengan unas dimensiones mínimas de 40x2O. El Atlético ha estado recibiendo a los rivales en su cancha gracias al permiso de la IHF, que permitió esta salvedad únicamente hasta los cuartos de final.

Hace cuatro años, la IHF invalidó para competiciones oficiales de su área las canchas que no tuvieran las dimensiones mínimas estipuladas. Las gestiones realizadas por Francisco Alférez, directivo del Atlético, dieron como resultado que el secretario de la IHF, Pep Meier, autorizara, con carácter extraordinario, que el club español recibiera a los contrarios en su campo habitual. El fallecimiento de Meier el año pasado supuso la reestructuración de la IHF y Georges Barcker ocupó el cargo de gerente. Poco después comunicó al Atlético que, a partir de las semifinales, no admitiría que recibiera en su cancha de 39x40 metros a rivales europeos.

El Atlético busca ahora cancha. Ha pensado en la del Palacio de los Deportes, lo que supondrá, además, aumentar el aforo. De los 3.000 del Magariños se pasaría a los 12.000 del Palacio, con el consiguiente aumento de la taquilla, pues los socios del club pagan por ver el balonmano. El problema está en que la instalación no dispone de la cancha adecuada y ésta habría que traerla de Barcelona con la antelación suficiente para permitir la adaptación de los jugadores a la nueva superficie.

El Dukla de Praga eliminó en cuartos de final al Grosswallstadt (RFA) tras ganar 24-15 en su cancha y perder por 23-21 en la del rival. La otra semifinal la disputarán Metaloplastica Sabac (Yugoslavia) y Haffnarjardar (Islandia).

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