El Buffon español
Pese a su inexperiencia, Diego López, meta del Villarreal, seduce al 'calcio' por su físico
En el Villarreal nadie entiende ahora por qué el técnico, Manuel Pellegrini, tardó tanto en advertir que Diego López debía ser el portero titular. En concreto, toda la primera vuelta, en la que prefirió en la Liga al uruguayo Viera. "Pellegrini es conservador en eso y le cuesta cambiar a un jugador", explica un técnico del club, impresionado ante las prestaciones de Diego López (Paradela, Lugo; 1981). "Ya veíamos que era muy bueno en la pretemporada y estoy convencido de que vendrá el Milan, el Manchester o el Valencia y pagará su cláusula de rescisión [12 millones]", añade.
El más interesado es el Milan, que recela de sus dos guardametas actuales (Dida y Kalac) y ha preguntado por Diego López, un junco de 1,96 metros, ágil y flexible pese a sus 87 kilos. Reúne, pues, las cualidades físicas que tanto gustan en el calcio para los porteros. Lo más parecido a Buffon, el tótem del Juventus y de la selección azzurra. También Fabio Capello, cuando regresó al Madrid en 2006, se encaprichó de Diego López. Así, sólo la brillantez de Casillas y su condición de icono madridista disuadieron al técnico italiano del cambio. Diez años antes, en su primera etapa madridista, Capello ya exigió la contratación del alemán Illgner, otro tallo de portero.
"Tras Casillas, está entre los elegidos junto a Palop, Valdés y Reina", dice Buyo
El Villarreal, que hoy se enfrenta en San Petesburgo al Zenit en la Copa de la UEFA (18.00, La Sexta), pagó en el verano seis millones por Diego López pese a su corta experiencia en Primera con el Madrid: 11 partidos oficiales. En el Villarreal ha disputado seis encuentros en la Liga (siete goles), seis en la Copa de la UEFA (cuatro) y seis en la Copa del Rey (cuatro). Es decir, un principiante que transmite, sin embargo, la seguridad de un veterano. "Pasó por el Bernabéu y el Camp Nou y no le tembló el pulso", subraya Paco Buyo, paisano suyo y ex entrenador en las categorías inferiores del Madrid. "Domina el juego aéreo, el espacio y el tiempo, bloca mucho y es coordinado", describe Buyo, que lo sitúa ya entre "los elegidos; después del capitán general, Casillas, está Diego con Palop, Valdés, Reina...".
"Yo destacaría su buena cabeza. Tiene formación y madurez", opina Vicente del Bosque, que recuerda que tuvo "una trayectoria difícil", en referencia a una cesión al Alcorcón y a su sumisión al imperio de Casillas. Superada esa sombra, ahora tiene el mundo a sus pies.
