La selección, sin gimnastas ni entrenadoras tras el éxito en los Campeonatos del Mundo
La gimnasia rítmica española empieza de nuevo. Dos días después de que finalizaran los Campeonatos del Mundo, disputados en Alicante, la selección nacional se ha quedado sin gimnastas ni entrenadoras, ya que todas ellas por unas causas u otras, han decidido retirarse de la competición.Carolina Pascual, subcampeona olímpica, y Carmen Acedo, cuarta en los Mundiales de 1991, no pudieron lograr medallas en el concurso general, pero en las finales por aparatos triunfaron con las mazas al lograr respectivamente la medallas de plata y la de oro. Pascual, de 17 años de edad, abandona la pista para dedicarse a los estudios. Acedo, la primera gimnasta española que ganó medallas en un Mundial, ha tenido muchos problemas con las lesiones, se declara cansada por llevar siete años fuera de su casa y, en definitiva, desea dedicarse a otras actividades.
Rosabel Espinosa y Amaya Cardeñosa, que completaban el cuarteto español que ha competido en Alicante, también han anunciado su intención de dejar el equipo.
La retirada de Pascual y Acedo ya era esperada, puesto que, a pesar de su juventud, llevan muchos años dedicadas a un deporte tan duro como la gimnasia rítmica, en la que el próximo objetivo, los Juegos Olímpicos de Atlanta 96, habría significado para ellas un excesivo esfuerzo de dedicación y longevidad.
La búlgara Emilia Boneva y Ana Roncero también abandonan la dirección técnica de la selección, en la que se encontraban desde 1982, un problema más que añadir. Boneva ya había dejado el equipo tras los Juegos Olímpicos de Barcelona 92, pero la federación la convenció para que ayudase al equipo al meno hasta la cita alicantina.
