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El Madrid se la juega con un equipo plagado de bajas

Los blancos pueden caer ante un Segunda B en una competición que no ganan desde 1993

El Real Madrid afronta esta noche su primera prueba de fuego en lo que va de temporada. Los blancos pueden decir adiós a la Copa del Rey si no logran remontar el resultado de la ida (3-2) ante el Real Unión de Irún. Para el partido de vuelta en el Bernabéu, Schuster no podrá contar con los lesionados Van Nistelrooy, Robben, Pepe, Diarrà y Torres. A esta retahíla de bajas se une la de Rubén de la Red, que continúa realizándose pruebas médicas desde el desmayo que sufrió en el partido de ida.

Tampoco estará Sergio Ramos, que cumplirá hoy su partido de sanción a consecuencia de la cartulina roja que vio en Liga ante el Málaga. Y además se quedan fuera de la convocatoria, por decisión técnica, el guardameta Iker Casillas, Heinze y Guti. Por tanto, los menos habituales en el conjunto blanco tendrán que resolver la papeleta de pasar a octavos frente a un equipo, el Real Unión, que ha encadenado siete victorias consecutivas en su división (Segunda B) y que ya conoce lo que significa ganar al actual campeón de Primera.

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El equipo tranquilo

Sin las alineaciones confirmadas todavía, es presumible que Schuster opte esta noche por un dibujo ofensivo ante la imperiosa necesidad de marcar, con Dudek en portería, Salgado, Cannavaro, Metzelder y Marcelo en la zaga, Javi García de pivote defensivo ante la ausencia de Diarrà, Sneijder, Van der Vaart y Drenthe en el mediocampo y Raúl y Saviola en la delantera, con Higuaín en el banco para darle descanso después de la borrachera de goles que se dio ante el Málaga. Schuster también ha convocado para el partido de hoy a los canteranos Chema Antón y Alberto Bueno, un defensa y un delantero respectivamente que están realizando una buena labor en el Castilla.

En la pasada edición de la Copa, los madridistas cayeron en octavos de final ante el Betis. Dos empates, uno sin goles en el partido de ida en el Ruiz de Lopera y otro, a uno, en el Bernabéu, despidieron a los blancos de una competición que no gana desde 1993, año en el que se impuso en la final al Zaragoza por 2-0. Este año, todavía en dieciseisavos de final, el Real Madrid tiene en frente a un rival modesto pero contundente arriba y con muchas ganas de triunfar en el templo de Concha Espina, además de un resultado de ida adverso y una plantilla llena de bajas, un reto difícil para alcanzar los octavos de final.

Drenthe disputa un balón en el partido de ida.
Drenthe disputa un balón en el partido de ida.Jesús Uriarte

Quince años sin ganar

La polémica sobre el supuesto desinterés que muestran los equipos grandes en la Copa del Rey se reaviva cada vez que conjuntos como Real Madrid o Barcelona se quedan fuera en las primeras rondas. El Barça se proclamó campeón de esta competición por última vez hace diez años. El Madrid hizo lo propio hace quince, en 1993, cuando se impuso al Zaragoza por 2-0 en la final disputada en el entonces Luis Casanova de Valencia (el actual estadio de Mestalla). Por entonces Paco Buyo guardaba la portería madridista, Porlán Chendo (el incombustible), Mikel Lasa y Fernando Hierro protegían la zaga y otras figuras como Manolo Sanchís, Míchel y Butragueño, entre otros, completaban un plantel histórico. También estaba Esnáider (el argentino, no el holandés) y Benito Floro se sentaba en el banquillo.

Fue la última vez que los blancos levantaron la Copa. La decimoséptima de las 36 finales que han disputado.

El Real Unión de Irún, por su parte, ha conquistado este campeonato en cuatro ocasiones. La última en 1927 en una época dorada para el club guipuzcoano. A partir de entonces el equipo se mantuvo una serie de años en posiciones intermedias en Liga hasta que descendió de categoría (a Segunda) en 1932.

Incidencia en el servicio de venta de entradas

A lo largo del día de hoy, los socios del Real Madrid que han querido ceder su localidad para el partido de Copa no han podido hacerlo hasta media hora antes del inicio del encuentro. Un fallo en el servicio telefónico destinado a ese efecto no les ha permitido dejar libre su entrada a través de una llamada telefónica. Sólo a través de internet ha sido posible efectuar la cesión, por lo que muchos socios que no tenían acceso a la Red se han quejado de este problema en el servicio telefónico. Una hora y media antes del partido se ha solventado el problema.

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