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ATLETISMO

Fallece Primo Nebiolo, el segundo zar del mundo del deporte

Primo Nebiolo, el forjador del atletismo profesional, presidente de la Federación Internacional (IAAF), de la Asociación de Federaciones Olímpicas de Verano (ASOIF), y de la Federación del Deporte Universitario (FISU), además de miembro del Comité Olímpico Internacional (COI), falleció ayer, a los 76 años, en Roma, tras sufrir un ataque cardiaco. Aunque su salud se había deteriorado últimamente, acababa de pasar positivamente una revisión médica.

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Un personaje irrepetible

El polémico dirigente italiano, muchas veces discutido por sus métodos o manipulaciones, falleció en la madrugada del domingo en la clínica Mater Dei de Roma a consecuencia de un infarto de miocardio sólo diez semanas después de haber sido reelegido en Sevilla por sexta vez consecutiva como presidente de la IAAF. Le acompañaba su esposa, Giovanna, y su médico personal, Dino Petrucci, que tras examinarlo en su casa de Roma había recomendado su ingreso en un hospital, contra la opinión del paciente, que después de haber trabajado con normalidad durante toda la tarde en su despacho se había sentido indispuesto por la noche. Nebiolo falleció a las dos de la madrugada. Hoy, a las 10.30, la capilla ardiente será instalada en la sala de honor del Comité Olímpico Italiano (CONI), organismo a cuyo comité ejecutivo perteneció desde 1973. El martes, a las 16.00, será enterrado en la localidad de Scurzolengo, cercana a Turín, de la que procede la familia de Nebiolo. El matrimonio no deja hijos. El senegalés Lamine Diack, actual vicepresidente de la IAAF, se hace cargo de la presidencia y desempeñará estas funciones hasta que un congreso extraordinario elija a un nuevo presidente.Nebiolo no había sufrido ningún accidente cardiovascular anteriormente, pero sí tenía la salud bastante deteriorada en los últimos tiempos. Su vitalidad no era la misma y se le veía incluso lento y torpe en sus movimientos. Hace 15 días padeció una fuerte gripe, con episodios de fiebre muy alta que lo debilitó mucho aunque, aparentemente, se había recuperado por completo.

Durante los Mundiales de Sevilla, en agosto pasado, Nebiolo se enorgullecía de haber convertido la IAAF de una pequeña empresa en una multinacional. Cuando accedió a la presidencia en 1981, la IAAF trabajaba con un presupuesto de 50.000 dólares, apenas unos ocho millones de pesetas. Hoy maneja cuarenta millones de dólares anuales, unos 6.500 millones de pesetas, procedentes, sobre todo, de los patrocinadores y de los derechos de televisión. Como primer baluarte olímpico también es el que más dinero recibe de los beneficios que reparte el COI.

Nebiolo era uno de los dirigentes deportivos con mayor influencia del mundo. El segundo, tras Juan Antonio Samaranch, presidente del COI. Saltador de longitud y jugador de rugby en su juventud, participó en el movimiento partisano desde 1943. Fue capturado por tropas alemanas y encarcelado en la prisión de Turín, de la que se escapó para reunirse con la resistencia italiana en Monferrato. Durante su trayectoria deportiva ha desempeñado altos cargos en Italia y en el mundo hasta ser nombrado, en 1992, miembro del COI por Samaranch, que ayer lloraba "a un gran colaborador y a un leal amigo". Y añadió: "Con Nebiolo desaparece uno de los grandes dirigentes deportivos de este siglo, que supo elevar el deporte al lugar que le correspondía en nuestra sociedad contemporánea". Aunque en algunos momentos desde su incorporación al COI Nebiolo le produjo algunas incomodidades a Samaranch por su afán de protagonismo, la habilidad de ambos permitió que se mantuvieran en su lugar, sin más conflictos. La falta de salud progresiva de Nebiolo también colaboró a la calma.

Negociador y negociante

Presidente de varias empresas, casi todas del sector de la construcción, Nebiolo hizo su última contribución al deporte italiano al colaborar estrechamente con la candidatura de Turín a los Juegos de Invierno de 2006, que resultó ganadora hace unos meses. Compensaba, de esta forma, el fracaso personal que sufrió como miembro significado de la derrotada candidatura de Roma a los Juegos de Verano de 2004 ante Atenas.El dirigente fallecido introdujo grandes novedades para hacer del atletismo un gran negocio en la frontera con el nuevo milenio. Algunas de sus apuestas, como los Campeonatos del Mundo (primero cada cuatro años y luego cada dos), el Grand Prix y la reciente Liga de Oro han alcanzado un gran éxito deportivo y económico.

Presidente de la Federación Internacional del Deporte Universitario (FISU) desde 1961, de la IAAF desde 1981 y miembro del COI desde 1992, Nebiolo extendió su influencia con su particular forma de hablar los seis idiomas que dominaba (italiano, español, francés, inglés, alemán y portugués). Su carrera ha abarcado todo el espectro de la administración deportiva. Su última aparición pública fue en el Festival de Cine Deportivo de Milán, el 21 de octubre pasado. Nueve días después participó en la reunión de la Comisión de Reforma COI 2000. Ayer mismo tenía previsto entrevistarse con el presidente honorario de la FIAT, Gianni Agnelli, para hablar de los Juegos de Invierno 2006. El fútbol italiano le rindió ayer un homenaje guardando en su memoria un minuto de silencio en todos los partidos de Primera y Segunda División. Las reacciones generales han alabado su categoría como dirigente para cambiar estructuras y modernizarlas, excepto la de Livio Berruti, medalla de oro en los 200 metros de los Juegos Olímpicos de Roma 1960, quien aseguró que Nebiolo "pisoteó los ideales deportivos".

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