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Reportaje:

Nadal pega duro

El español arrolla a Starace en Qatar y Federer vence a Korolev

Retumban aún los aullidos del Palau Sant Jordi, es Rafael Nadal, un tenista victorioso que acaba de endosarle un parcial de 13-0 a Tomas Berdych para acercar a España a la Copa Davis, y entonces, como quien no quiere la cosa, el número dos del mundo dice algo que sólo el paso del tiempo ha llenado de significado. "Para mí", cuenta, "es vital que intente llevar el punto con la derecha porque mi juego es un poco más vulgar si pego tres reveses seguidos".

Donde Nadal dijo vulgar probablemente podría haber dicho corriente o mediano. No hay nada de ese tenista de diciembre en el tenista de ayer. Nada en el jugador que arrolla a Potito Starace por un doble 6-2 en octavos del torneo de Qatar. Y nada en el que hoy jugará contra el belga Steve Darcis en cuartos. Muchas cosas han cambiado desde el difícil fin de curso de 2009 al presente inicio de 2010. Todas requieren aún de la prueba de raquetas más afiladas, como la de Roger Federer, que ayer se impuso al ruso Korolev por 6-2 y 6-4. Una, sin embargo, destaca sobre todas: el reencontrado equilibio -31 golpes ganadores por 17 errores no forzados- se beneficia mucho del abandono del uso continuo del revés cortado defensivo en favor de más contundencia. Ese revés no es vulgar. Ese revés -que requiere de piernas frescas y pies ligeros, porque Nadal lo ejecuta como un leñador, en movimiento rotatorio, y para eso hay que estar bien plantado-, es muy peligroso.

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"Mi única ambición es jugar mejor", dijo la víspera el español, que se enfrenta a un Himalaya: de enero a Roland Garros defiende 6.125 puntos, tan bueno fue su inicio de temporada en 2009. Federer, el número uno, ganó 3.460 en ese periodo, así que tiene 2.665 menos de los que preocuparse. "Pero a mí", insistía Nadal, "el ránking, el número uno o el dos, no me preocupa. Estoy al ciento por ciento de forma física y estoy pegando la pelota más duro". "Esta victoria", cerró ayer; "subraya que estoy en muy buena forma".

Nadal arrolla. Federer arrasa. El suizo, sin embargo, ya tiene hoy una buena piedra de toque: le espera el tremendo Ernest Gulbis, alias el Principito, uno que es nieto e hijo de actriz, pero que no gusta de sutilezas interpretativas sobre la pista: ayer venció al italiano Andreas Seppi por 6-4 y 7-5 con una sinfonía de saques brutales y golpetazos inmisericordes.

Por otra parte, el marroquí Yunes el Aynaoui, de 38 años, anunció su retirada tras perder contra Darcis por 6-3 y 6-1.

Federer, ayer en Qatar.
Federer, ayer en Qatar.EFE

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