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CICLISMO: MUNDIALES EN RUTA

Olano rompe relaciones con Banesto

El ciclista guipuzcoano exige a José Miguel Echávarri que pida disculpas a su mujer

Carlos Arribas

El sábado fue el cumpleaños de José Miguel Echávarri. El director del Banesto hizo 51 años y en el hotel de la selección española de ciclismo, en una mesa de la cafetería, unos amigos le rindieron un pequeño homenaje. Eran el padre de Abraham Olano y su cuadrilla. El campeón del mundo de contrarreloj se había marchado, lesionado, el viernes a España. Antes de irse al aeropuerto habló con su aún director y se citaron para tratar mañana de su renovación, para que Banesto contestara a la petición del corredor y demás. Después, Olano tenía previsto hablar con el ONCE-Deutsche Bank, el único equipo que le había hecho una oferta firme. Sin embargo, puede que esa planificación haya quedado rota definitivamente a tenor de unas declaraciones del corredor publicadas ayer en el diario Marca. "No hablaré con Echávarri hasta que no pida disculpas a mi mujer", dice Olano. Echávarri no quiso hacer ayer comentarios al respecto y prefiere esperar a hablar personalmente con Olano antes de reaccionar. De momento, no sabía de qué se tenía que disculpar. Probablemente, Olano hablará sólo con la ONCE de su futuro.La mujer de Olano, Karmele Zubillaga, actúa también como su representante. Es la persona designada por el corredor para negociar en su nombre. Una doble función que nunca ha agradado a Echávarri. "Prefiero no negociar con tu mujer", le dijo el director al ciclista, "porque ante ella me siento limitado. No puedo olvidar que es tu mujer. No me siento con libertad para actuar sin problemas". Ese escollo, sin embargo, se había salvado: Echávarri, que había hecho una oferta a Olano, hablaría con el ciclista de la contrapetición suya. Pero había otro punto de fricción. La influencia positiva de Karmele sobre Olano ha sido tan grande que, probablemente, si no hubiera estado emparejada con ella, Abraham no sería ahora ciclista profesional. Ella le animó, le levantó la moral cuando desapareció el primer equipo profesional en que corrió (el CHCS), le obligó a adelgazar para que pudiera empezar a subir algún puerto, le hizo creer en sí mismo. Pero, según quienes tratan con el corredor, a veces va demasiado lejos Karmele. En la pasada Vuelta hubo un momento clave de malestar para los directores y el cuerpo técnico del Banesto. Fue en la etapa de las Lagunas de Neila, cuando Karmele, que hablaba regularmente para la COPE, criticó en la radio la actuación del equipo con respecto al liderato de su marido. Todo fue porque su compañero Jiménez había atacado y ganado la etapa. Fue un trago duro que enturbió el resto de la Vuelta y hasta la victoria final del guipuzcoano. "Habíamos hecho la mejor Vuelta de la historia y el ambiente del equipo parecía de funeral al final", comenta un miembro del equipo.

De nuevo la aparición de la figura de Karmele en las tormentosas negociaciones para la renovación de Olano va a pesar. Si es que finalmente se sientan a hablar.

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Sobre la firma

Carlos Arribas
Periodista de EL PAÍS desde 1990. Cubre regularmente los Juegos Olímpicos, las principales competiciones de ciclismo y atletismo y las noticias de dopaje.

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