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Oviedo celebra en la calle la fatalidad de Hamilton

Los asturianos vibran en la última carrera del Mundial

Oviedo, la ciudad natal de Fernando Alonso, el piloto que hoy se ha quedado a las puertas de lograr el tercer título consecutivo de campeón del mundo de Fórmula Uno, ha arropado a su paisano, con miles de personas concentradas en la calle y en el Auditorio Príncipe, que celebraron especialmente la fatalidad de su principal rival Lewis Hamilton.

Las más de dos mil personas que se habían dado cita en el Auditorio Príncipe Felipe, el lugar de cita del ''alonsismo'' desde la llegada del joven piloto a la Fórmula Uno, abarrotaron el recinto, cuyas entradas se agotaron a principio de semana para ver la carrera del autódromo brasileño de Interlagos, en Sao Paulo.

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Los gritos y el entusiasmo desbordado de los seguidores de Fernando Alonso han alcanzado los momentos más culminantes cuando las imágenes que ofrecía televisión recogían los primeros adelantamientos del ovetense y la salida de pista de Hamilton. La aparición en pantalla del padre del inglés irritó definitivamente al auditorio. El Auditorio Príncipe de Asturias ha acogido en los dos últimos años, el 25 de septiembre de 2005 cuando Alonso logró su primer título mundial, y el 22 de octubre de 2006, con motivo del segundo, sonoras celebraciones que los aficionados han proseguido en la Plaza de América.

Precisamente en este lugar, conocido también como la "Gabinona", al ubicarse allí la fuente en la que el deporte de la ciudad suele celebrar sus éxitos, acogió esta tarde a miles de seguidores que presenciaron allí la carrera a través de una pantalla gigante. Algunos vehículos, en un número muy inferior al de años anteriores, circulaban por las principales calles de la capital asturiana haciendo sonar la bocina y con banderas del Principado. Los ecos de la "marea azul" permanecen esta noche en la ciudad natal del piloto español, que aún luce en las fachadas de algunos de sus edificios pancartas gigantes en apoyo de su paisano con textos como el que indica "Fernando, gracias por hacer nuestros sueños realidad".

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