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Crónica:MUNDIAL DE F-1 | Gran Premio de España
Crónica
Texto informativo con interpretación

"Sabía que me iban a doblar"

Alonso explica que la falta de aerodinámica del Ferrari le provocó serios problemas con los neumáticos duros

Oriol Puigdemont

Fernando Alonso demostró el sábado por qué se ha ganado la consideración de primer piloto de Ferrari, aunque desde La Scuderia se empecinen en asegurar que sus esfuerzos están repartidos entre Felipe Massa y él. En una vuelta perfecta, al límite en cada curva, el español consiguió plantarse en la cuarta plaza de la parrilla, un botín inesperado que le llevó a decir, afectado por el subidón del momento, que en el arranque de la prueba atacaría con toda sus fuerzas porque no tenía nada que perder. La declaración sorprendió por su contundencia y porque venía de uno de los pilotos que peores salidas había llevado a cabo. Esta vez, sin embargo, Alonso reaccionó instantáneamente cuando los semáforos se apagaron, se quitó del medio a Hamilton por aceleración y se protegió tras Webber. Más preocupado por su compañero que por la mancha roja que se le acercaba, el australiano se fue al exterior para taponar a Vettel, de forma que el de Oviedo identificó un hueco en el interior del primer viraje, apuntó allí y salió en cabeza de la primera curva.

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Alonso fue capaz de contener los arreones de sus rivales hasta su segunda parada. Entonces fue superado por Vettel (19ª vuelta), primero, y por Hamilton (23ª), después. "He disfrutado mucho de esas vueltas a pesar de la presión. He tenido que emplear todo lo que tenía a mi alcance para defenderme, pero ha sido bonito rodar líder ante mi afición", dijo. Hasta ese momento, el 150º Italia circulaba un poco más lento que el Red Bull y el McLaren, aunque la habilidad de Alonso lo había mantenido a flote. Lo que ocurrió después, cuando se le incorporó el primer juego de neumáticos duros (29ª vuelta), hizo que la cúpula de la marca de Maranello se zarandeara al comprobar que su prototipo perdía más de tres segundos por vuelta en relación a sus rivales y que era devorado por Webber y Button (37ª). El shock fue tan brutal, que desde el muro decidieron adelantar su última entrada porque pensaron que las gomas habían salido defectuosas, de modo que Alonso tuvo que afrontar los últimas 26 giros con un solo juego.

"Hemos adelantado nuestra última parada porque las gomas iban muy mal. Pensamos que eran defectuosas y decidimos entrar a cambiarlas", reconoció. Consciente del calvario que le quedaba por delante, disfrutó viendo por las pantallas de televisión la lucha que mantuvieron Vettel y Hamilton. Gracias a eso supo también que iba a ser doblado, aunque optó después por restar importancia al asunto. "Sabíamos que aquí íbamos a sufrir porque este circuito precisa mucha carga aerodinámica. Sabía que me doblarían", argumentó el bicampeón, "y eso es precisamente lo que le falta a nuestro coche. Eso destroza los neumáticos porque van derrapando y, así, es imposible que adquieran temperatura. No hemos podido hacer trabajar el coche con las gomas duras".

Para esta prueba, Pirelli desplazó por primera vez en lo que va de curso los compuestos superduros, una decisión muy criticada desde Ferrari por razones obvias. Este discurso, no obstante, es distinto del que emiten los responsables del suministrador, como no podía ser de otra forma. Paul Hembery, el director deportivo de la marca italiana, considera que el gran premio ha sido un éxito rotundo se mire por donde se mire. "Creo que la goma superdura ha ido fenomenal. Querían elevar su durabilidad y creo que lo hemos conseguido. Yo no puedo responder por Ferrari ni por los problemas que parecen tener allí, pero, si les preguntan, McLaren o Red Bull les dirán que sus coches han funcionado bien", se defendió el técnico.

Después de cuatro carreras a rebufo de Red Bull, Ferrari y McLaren debían reivindicarse este fin de semana y reivindicar así su condición de equipos grandes. Lo ha hecho la escudería de Woking, que se ha medido de frente con la austriaca, al tiempo que la de Maranello ha recibido otro bofetón, este de dimensiones cósmicas, que deja en una situación extrema a su baza más importante, perdido en la quinta posición de la clasificación general, a 67 puntos de Vettel, que hasta ahora solo ha dejado escapar siete. Todo un contraste.

Vettel festeja el triunfo, mientras Alonso pasa tras él cabizbajo.
Vettel festeja el triunfo, mientras Alonso pasa tras él cabizbajo.Vettel festeja el triunfo, mientras Alonso pasa tras él cabizbajo.

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