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Reportaje:

"Tenemos una capacidad ilimitada para complicarnos"

El regreso tardío de Maxi y Agüero provoca la última polvareda en el Atlético

José Marcos

Obsesionado con dar caza al Villarreal, el último equipo en puestos de Champions, el Atlético no pasa un día tranquilo. "Tiramos el trabajo de semanas perdiendo en Mallorca, ahora no nos aseguramos de tener los internacionales de vuelta cuando corresponde... Así somos", resume un mando rojiblanco. Uno tras otro, los problemas se acumulan en el club del Manzanares. La última bronca la provocaron Maxi y Agüero, que, ojerosos y fundidos tras los compromisos de Argentina con Venezuela y Bolivia, regresaron ayer por la tarde "agotados" y tambaleantes por los efectos del jet lag y el 6-1 en La Paz. Les acompañaban Gago y Heinze, del Madrid. "Menos mal que Agüero no jugó y Maxi lo hizo 57 minutos", se alivian en el cuerpo técnico.

"No voy a decir nada, vengo de un viaje de 13 horas", dijo el Kun con la lengua fuera, abriéndose paso en la terminal 4 del aeropuerto de Barajas. "La capacidad del Atlético para complicarse parece ilimitada. Cuando no es una cosa, es otra", resoplaban exasperado los ayudantes de Abel Resino, que convocó a los dos jugadores a las 17.30 en la ciudad deportiva de Majadahonda "más que nada para ver cómo nos llegan".

Los sectores más críticos del club ponen de ejemplo la "efectividad" del Barcelona frente a la "dejadez" en los despachos del Calderón. "Los responsables del Barça siempre están pendientes de los detalles, de que el jugador de turno, en este caso Messi, tenga disponible el billete en el avión que antes cruce el charco. Siempre nos pasa lo mismo. Parecemos nuevos", dice un cargo del Atlético. La Federación Argentina, que es la que se encarga de los viajes de los futbolistas, reservó un asiento para La Pulga en el primer vuelo transoceánico. La estrategia tuvo sus frutos. Messi, tras hacer escala en Barajas, se presentó en su destino pasadas las ocho y media de la mañana. Maxi y Agüero, cuyo vuelo llegó con hora y media de retraso, lo hicieron a las cuatro de la tarde. "No lo perdieron, vinieron en el que le correspondía", dicen en el club.

El vestuario tampoco termina de entender que los internacionales suramericanos se incorporen tarde al trabajo. "Son cosas que... Hay gente que se encarga de todo esto y tienen que intentar ver que no puede ser posible que el viernes no esté toda la plantilla", criticó Raúl García. "Todo es muy relativo, porque Forlán se ha dado un palizón con Uruguay y sí que ha llegado a tiempo. Aunque estaba cansado no se ha perdido el entrenamiento", meditaban otras voces del vestuario.

Con Simão y Maniche presentes desde el jueves, Abel pudo contar ayer con Forlán, Seitaridis, Ujfalusi, Heitinga y Banega, que se incorporaron al penúltimo entrenamiento antes de la visita de Osasuna. Forlán fue el que se ejercitó a menor ritmo. "Lleva 19 goles, y le ha marcado cinco veces a Osasuna en sus últimos seis enfrentamientos. Le necesitamos y mucho", reconocen en el Atlético.

Maxi y Agüero, en un partido con el Atlético.
Maxi y Agüero, en un partido con el Atlético.

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Sobre la firma

José Marcos
Redactor de Nacional desde 2015, especializado en PSOE y Gobierno. Previamente informó del Gobierno regional y casos de corrupción en Madrid, tras ocho años en Deportes. Es licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense y Máster de Periodismo de EL PAÍS. Trabajó en Starmedia, Onda Imefe y el semanario La Clave.

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