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Reportaje:

Torres pierde el sitio

El ariete del Chelsea, que ante Liechtenstein se quedó en la grada, solo ha sido titular en dos de los últimos 13 encuentros en los que ha sido convocado con la selección española

Jordi Quixano

Ya no es titular. Le falta lo que siempre le definió, el gol, por lo que el técnico de España, Vicente del Bosque, ha dejado de considerarle el delantero centro de España. Convocado en 13 de los 14 encuentros de la selección desde que se acabara el Mundial de Sudáfrica -al otro no acudió por lesión-, Fernando Torres (Fuenlabrada, Madrid; 1984) solo ha partido de inicio en dos partidos, en el amistoso ante Italia y en el de ida de la fase de grupos para la Eurocopa frente a Liechtenstein. "Es una ecuación simple, cuando empiece a marcar...", señalan desde su entorno; "porque lleva muchos años haciéndolo y eso no se olvida". Tampoco se le borrará fácil de la memoria, sin embargo, que frente a Liechtenstein, vio el partido desde las gradas de Las Gaunas, con el chándal y no de corto, por primera vez desde 2006, cuando Luis Aragonés le descartó para un amistoso ante Rumanía.

El jugador no había sido descartado desde un amistoso ante Rumanía en 2006
Su falta de gol se ha dado tras el ruidoso fichaje por el Chelsea en el invierno pasado
Llorente, Negredo y Soldado le disputarán el puesto para la próxima Eurocopa

Su cara, ceño fruncido y mandíbula apretada, hablaba. Desde su entorno se asegura que está enfadado. "Quien no esté bien, no vendrá a la selección", advirtió, nada más sellar el pase del equipo para la cita continental de Polonia y Ucrania, Del Bosque, que no ha perdido la fe en el delantero, al que en el pasado Mundial de Sudáfrica definió como "la referencia de España en el ataque", con el que siempre cuenta por más que su remate se haya desviado, sobre todo desde que fichara por el Chelsea.

Camisetas del Liverpool quemadas, un transfer request [petición de traspaso] de por medio, desplazamiento en helicóptero, un pago de 58,8 millones -el sexto traspaso más caro de la historia, superado por Cristiano Ronaldo (94 millones: del United al Madrid), Zidane (75: del Juventus al Madrid), Ibrahimovic (66: del Inter al Barça), Kaká (65: del Milan al Madrid) y Figo (61,5: del Barça al Madrid)- y un revuelo considerable hasta que el Chelsea y su extensa chequera consiguiera la firma del The Kid cuando se echaba el cierre al mercado invernal del curso anterior. "Necesitaba dar un paso adelante por mis ambiciones como jugador. Después del Chelsea, no hay equipos de más nivel", argumentó el delantero, que se las prometía felices en un club que solo encuentra resistencia en el Manchester United y el Manchester City, quizá en el Arsenal. Pero su puntería se diluyó al tiempo que acrecentaron los rumores y se ensañaron las rechiflas de los hinchas rivales, masificados en facebook y twitter, con grupos bautizados como "Yo he marcado tantos goles como Torres en el Chelsea". Contabilizó el punta 14 duelos y ni una sola red, hasta que logró batir al West Ham. Pero volvió a apagarse en los siguientes cuatro partidos para firmar la peor segunda vuelta de su carrera. El mazazo, sin embargo, llegó cuando la prensa le cuestionó al extécnico blue, Carlo Ancelotti, sobre si había sido un error alinear de inicio a Torres en la vuelta de las semifinales de la Champions del curso anterior. "Tal vez", respondió, lejos de esa frase que repetía como una coletilla en los partidos anteriores -"estoy seguro de que pronto marcará"-, difuminada al fin con la falta de gol.

Fue, en cualquier caso, un curso muy complicado para Torres, que perdió la titularidad en el tramo final del exitoso Mundial, escaso de ritmo porque forzó, llevado por la ilusión, para llegar a tiempo tras una operación en el menisco. "Ahora está fuerte, está muy bien", aclaran desde su entorno. Le falta, sin embargo, el gol, seco de nuevo en la Premier -cero dianas en tres partidos-, y enrabietado porque ya no es el epicentro del ataque de España, toda vez que a Villa se le descuenta porque no actúa de 9. Su crédito, en cualquier caso, no está agotado, internacional en 87 encuentros (62 como titular), con 27 tantos, uno cada 187 minutos. Pero también pelean por el puesto Llorente (siete dianas en 18 partidos; una cada 98 minutos), Negredo (cinco en siete; 74), titular en los dos últimos duelos de la selección, y en la recámara Soldado (cero en dos).

Más amoldado al Chelsea y con la confianza absoluta del entrenador André Villas-Boas -"Su calidad está fuera de toda duda y no quiero que se obsesione con el gol porque lo que quiero es ganar", apuntó hace poco-, se presume que la mala racha de Torres tiene fecha de caducidad. Más si se tiene en cuenta que en el Liverpool firmó 65 goles en la Premier, el mejor registro (uno cada 120 minutos) de las últimas tres temporadas y media, por delante de Drogba (cada 151), ahora su compañero en la línea ofensiva del Chelsea. Y fue él en el Prater de Viena, tras cobrarse el sitio en una carrera con Lahm, el que picó el balón ante Lehmann, el que resolvió la final de la pasada Eurocopa. Le quedan nueve meses para Polonia y Ucrania, para recobrar el puesto y volver a ser la referencia del ataque español.

Fernando Torres, junto a Vicente del Bosque, en un entrenamiento de la selección.
Fernando Torres, junto a Vicente del Bosque, en un entrenamiento de la selección.ALEJANDRO RUESGA

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