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"Queremos forofos, no muñecos"

La federación estudia poner gradas supletorias en Sevilla para el partido con Dinamarca

La Federación Española de Fútbol comenzó a preparar el decisivo partido España-Dinamarca, el 17 de noviembre en Sevilla, prácticamente en el descanso del encuentro de Dublín, el pasado miércoles, con Irlanda. El 0-3 que entonces figuraba en el marcador señaló la dirección de la capital andaluza como etapa trascendental en el camino hacia el Campeonato del Mundo de Estados Unidos 94. Los federativos desean que al equipo no le falte el apoyo de la afición ni el ambiente de las ocasiones históricas. Por eso pretende instalar un graderío portátil en las localidades de a pie cuya utilización prohíbela Federación Internacional (FIFA).

"Queremos forofos, personas que animen a la selección, no muñecos", comentó ayer Ángel María Villar, el presidente de la Federación, al recordar lo sucedido en el encuentro contra Irlanda del Norte en el campo del otro equipo sevillano, el Betis. En esa ocasión, figuras de cartón piedra detrás de las porterías simularon aficionados para evitar tanto vacío. La cita. de ahora es más importante y las gradas portátiles supondrían aumentar en 25.000 el número de los espectadores y llegar a los '50.000. El estadio Sánchez Pizjuán tiene un aforo de 62.000, pero sólo la mitad de sus plazas son de asiento, las únicas que la FIFA permite usar.

Para estudiar la viabilidad de su proyecto y el coste, Villar ha enviado a Sevilla a su arquitecto, Pablo Carández. Los dirigentes optaron por este graderío portátil después de comprobar su resultado en el partido de Dublín, para el que los irlandeses lo alquilaron a la misma empresa que lo instaló semanas atrás en la Copa Ryder, el torneo bienal de golf que enfrenta a Europa con Estados Unidos. Todo depende de que se halle una firma que sufrague los gastos con la contrapartida de la campaña de publicidad.

Gran demanda de entradas

"La demanda de entradas nos ha desbordado en dos días. A falta de un mes, tenemos solicitudes para llenar dos veces el Sánchez Pizjuán", comentó Eduardo Herrera, el presidente de la Federación Andaluza. Los federativos quieren dar ambiente por la trascendencia. "Nunca nos ha fallado. Es importante jugar con 12 jugadores. Es decisivo el calor del público. Javier Clemente [el seleccionador] ya anunció que jugar en Sevilla supone gol y medio", dijo Villar, quien añadió: "Ojalá que siempre nos jugáramos la clasificación en el último partido y en Sevilla". Dinamarca tampoco se ha quedado corta a la hora de requerir boletos: 5.000. "Contra el vicio de pedir, la virtud de no dar", fue la réplica de Villar, que no tiene intención de subir el precio de las localidades: oscilará entre las 800 y las 3.000 pesetas.

Además, la Federación va a luchar contra la reventa y las falsificaciones propias de un acontecimiento semejante. "Vamos a cambiar el modelo de la entrada e incluir en ella un hilo magnético", advirtió Herrera.

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