El cuarto oscuro del fútbol

El extraño caso de la conversación entre el ex futbolista de la Real y del Tenerife, Jesuli, y el presidente realista, Iñaki Badiola, en la que Jesuli reconoce haber cobrado por perder con el equipo isleño frente al Málaga, propiciando el ascenso del equipo andaluz, en detrimento de la Real, no deja de proyectar sombras y dudas.

La conversación, transcrita ayer por El Mundo, revela el reconocimiento del jugador de que los futbolistas del Tenerife cobraron por perder el 15 de junio de 2008. "Mis compañeros se vendieron", afirma el jugador que, a pesar de no disputar el encuentro, dice haber cobrado "entre 5.000 y 7.000 euros. Si no fueron 6.000".

Un día después de la publicación, Jesuli lo niega. Lo niega todo. Afirma que "las manifestaciones", de las que existe prueba grabada, "son absolutamente inciertas", curiosamente porque "se han sustraído de una conversación privada entre Jesuli e Iñaki Badiola", para inmediatamente después negar que tanto el jugador como su entonces compañeros del Tenerife, cobraran cantidad alguna por caer derrotados ante el Málaga (2-1). Los dos argumentos se compadecen mal. Si la conversación se ha utilizado de forma tramposa por el presidente realista, reconociendo por tanto su existencia, difícilmente se puede negar el contenido de la misma. El comunicado, remitido por los abogados del jugador, sin embargo, mira al futuro de una posible acción penal, apelando a que la grabación de una conversación sin el conocimiento de una de las partes puede ser invalidada como prueba de delito en la jurisdicción penal.

Badiola, que oficialmente se encuentra en China por asuntos personales, ha echado más leña al fuego. El presidente donostiarra afirmó en Radio Marca que la conversación con el jugador se hizo con su consentimiento y si ha salido a la luz es "porque las personas involucradas están dispuestas a dar el paso". Badiola, pues, implica al jugador que, sin embargo, elude la condición de arrepentido y niega la mayor.

Las dudas son múltiples. La conversación se grabó en Zubieta, a donde oficialmente Jesuli había acudido a saludar a sus ex compañeros (jugó como cedido del Sevilla de febrero a junio de 2007). Extraña que dicha visita amistosa de un jugador sin ficha que entrena con el Sevilla Atlético para no perder la forma, acabara en una larga conversación con el presidente hablando del presunto soborno del Málaga a los jugadores del Tenerife.

La Real ya había denunciado al Málaga ante la federación por otra grabación de una presunta conversación entre Lorenzo Sanz y el agente del futbolista José González que no fructificó porque Lorenzo Sanz no tenía cargo alguno en el club, lo que invalidaba la actuación federativa.

Badiola fue más lejos y acusó ayer a Juanma Delgado, jugador del Tenerife, de ser el responsable de que la plantilla cobrara por dejarse ganar en La Rosaleda. Los jugadores han reaccionado como un solo hombre contra el supuesto delator. Los capitanes Juanma y Manolo Martínez -que formaban parte de la plantilla que se enfrentó al Málaga- negaron todo. "Especulaciones hay muchas, pero realidad es cero", dijo Juanma, quien sólo justificó estas declaraciones si hubieran sido "de cachondeo". "No he cobrado nada, ni primas por ganar, ni por perder". Nino aseguró: "Tenemos la cabeza alta; salimos a ganar; no he recibido un duro ni ahora ni nunca y me molesta que se ponga en entredicho mi profesionalidad". Después de aquél 2-1, con el que el Málaga ascendió, los jugadores no se vieron más, ni regresaron juntos a Tenerife. Cada uno emprendió sus vacaciones. El consejo de administración del Tenerife acordó ayer "iniciar todas las acciones legales que le competan en su defensa" y ha requerido notarialmente a Jesuli para que ratifique o rectifique.

El presidente del Málaga, Fernando Sanz, hijo del ex presidente del Real Madrid, calificó la conversación de "robada" y anunció que presentaría una "querella criminal" contra el ex jugador del Tenerife si no se retractaba de sus palabras. Una vez leído el comunicado de Jesuli anunció que no procederá contra el jugador, pero sí contra Badiola. "Este hombre se está pasando de castaño oscuro", afirmaron desde la entidad andaluza, que no mostró sorpresa alguna por la actitud de Badiola ya que "lo ha hecho en otras ocasiones, filtrando cosas y sacándolas a la luz cuando le interesa". Los dardos más envenenados de Sanz fueron para el máximo mandatario de la Real Sociedad, al que en todo momento se refirió en tono despectivo como "este señor" y "este personaje". "Es una situación muy desagradable, porque de este señor ya estoy hasta las narices. Es una obsesión persecutoria lo que tiene contra el Málaga y estoy ya un poquito harto", dijo. E insinuó que al dirigente donostiarra le espera un futuro negro: "Sólo hay que leerse el informe del proceso concursal de la Real que aconseja que este señor deje el club, porque lo está llevando a la desaparición".

La Real estudia llevar el caso a la Federación, que en cualquier caso podría abrir de oficio diligencias previas y si observara indicios de delito, tramitaría el caso a la fiscalía para su procedimiento penal. La impresión general es que Badiola intenta desviar la atención sobre los conflictos que vive con los administradores concursales en la Real.

Esta información ha sido elaborada por Eduardo Rodrigálvarez, Fernando Pérez, Héctor Iglesias, José Manuel Pardellas y Juan José Paradinas.