_
_
_
_
_
Reportaje:El fútbol base, en los 'grandes'

Un equipo hecho en casa

Once de los 24 jugadores de la plantilladel Barça proceden de La Masía y suman más minutos que sus compañeros

Iván Torreblanca nació el 4 de octubre de 2001, es del Barça, quiere ser futbolista y es el jugador más joven de la cantera azulgrana. Iván comparte equipo con Guillermo Amor Torres, o sea, con el hijo del icono de la pedrera, Guillermo Amor -ningún futbolista salido de La Masía ha ganado más títulos que él- y nieto de Toni Torres, defensa que formó en el equipo de la Liga de 1974. Los dos juegan en el equipo prebenjamín, creado esta temporada como punto de partida de la cantera, pues "los talentos se fidelizan cada vez más pronto", dice Txiki Begiristain, el director técnico.

A día de hoy, a las órdenes de José Ramón Alexanko, director del fútbol base, con Quique Costas de asesor y Albert Benaiges como responsable de las distintas categorías inferiores hasta los cadetes, el Barça controla más de 300 futbolistas y tiene en nómina a 24 entrenadores para sacar adelante una apuesta clara y declarada por llevar futbolistas al primer equipo. "Trabajamos pensando en el Camp Nou", reconoce Alexanko, que el domingo vio debutar en San Mamés a Víctor Sánchez, quien, al igual que Pedro o Busquets, ha recibido el empujón final de Pep Guardiola para alcanzar el primer equipo este curso.

"Los cambios de normativa han exigido otra mentalidad", explica Begiristain
El club busca chavales "técnicos y rápidos" para jugar con precisión y velocidad
Más información
Para el Madrid, un "riesgo"
El chollo de Miami

"Los cambios de normativa han exigido otra mentalidad en los últimos años. Messi sería el ejemplo más claro", confirma Begiristain; "es argentino, pero, a todos los efectos, lleva el sello de La Masía. Lo hemos hecho en casa". Y, en ese sentido, destaca las diferencias con el calcio o la Premier League: "Nosotros educamos a los futbolistas desde críos. Ellos los fichan de cadetes". Basta con mirar la jornada del 5 de octubre. Inter y Arsenal no alinearon a ningún jugador procedente de la cantera; Milan (Maldini), Bayern (Rensing), Chelsea (Terry) y Juventus (Marchisio), a uno; Liverpool (Carragher y Gerard) y Lyón (Benzema y Mounier), a dos; Madrid (De la Red, Casillas y Raúl) y Manchester (Brown, Giggs y O'Shea), a tres. Ese día, el Barça jugó con ocho canteranos.

Frank Rijkaard hizo debutar a 28 futbolistas procedentes de los equipos inferiores en sus cinco años en el Camp Nou. Algunos jugaron poco, cinco siguen en el primer equipo (Jorquera, Messi, Bojan, Víctor Sánchez y Pedrito). Otros terminaron en equipos de Primera (Christian, Rodri y Verdú en el Deportivo y Damiá en el Betis). También los hay que continúan en el filial (Víctor Vázquez, Oier, Rueda y Jeffren) y se cuentan los que se buscaron la vida en el extranjero como Javito (Paok), Orlandi (Swansea) y Marc Crosas (Celtic Glasgow). Todos, marcados por la Denominación de Origen, llevan el sello de La Masía de can Planes, una casa típica catalana del siglo XVII, que primero sirvió de oficinas y más tarde albergó la residencia por la que han pasado 493 chavales y, al menos, un 10% han jugado en el primer equipo; un 9% se han alineado en Primera y un 27% en Segunda. "El que pasa por La Masía tiene algo que le hace diferente, un plus que sólo te da haber competido con la camiseta del Barça desde niño", dice Guardiola, que se precia de la educación recibida en sus años formativos. "¿Verdad que un vino de La Rioja y uno del Priorat son diferentes? Pues en el fútbol ocurre lo mismo", insiste Charly Rexach, toda una vida en el Barça, 17 años como jugador y más de 20 como técnico: "El listón está muy alto. Preparamos a los chavales para que respondan a la máxima exigencia", asume Alexanko. Begiristain tercia: "Los niños crecen con la exigencia de ganar hasta los amistosos. La idea es formar a buenas personas y futbolistas competitivos".

Los técnicos aspiran a que dos o tres de cada generación alcancen el primer equipo. Pocas han dado más frutos que la llamada Quinta de lo Pelat -Celades, Álvarez, Moreno, De la Peña, Roger, Velamazán, Jordi Cruyff-, también resultó la del 80 -Xavi, Arnau, Puyol, Luis García- y la del 82 -Navarro, Reina, Arteta, Motta- y parece insuperable la del 87: Messi, Piqué, Víctor Vázquez y Cesc (Arsenal). Hasta once niños cameruneses juegan hoy, por otra parte, en las categorías inferiores llegados de la Fundación Eto'o. Alguno está a punto ya de dar el salto al filial, en el que juega la nueva perla: Assulin, internacional israelí con 16 años.

Once (Valdés, Piqué, Puyol, Xavi, Iniesta, Messi, Bojan, Jorquera, Pedrito, Busquets y Víctor Sánchez) de los 24 jugadores del primer equipo del Barça proceden de la cantera. Aunque Jorquera no se ha estrenado, los otros diez suman más minutos jugados que sus compañeros juntos. Han disputado el 51,6% de los minutos en la Liga y la Champions. Cifra que contrasta con la de los fichajes de año -sin contar a Piqué, hecho en la cantera- que no totalizan ni la quinta parte (15,9%).

Aunque no hay datos oficiales, se estima que el club destina unos 12 millones de euros al fútbol formativo. "La inversión es rentable", coinciden en el Barça; "no podríamos pagar un jugador como Xavi o Iniesta en el mercado". El club cuenta con 12 equipos: Barça B; dos de juveniles, cadetes, infantiles, alevines y benjamines, y uno de prebenjamines. Dispone además de psicólogos, fisioterapeutas y nutricionistas, además de profesores de refuerzo para los estudios. En junio se incorporó la figura de un entrenador específico que da clases de tecnificación individual a los jugadores.

El Barça busca que los chavales sean "técnicos, rápidos y con carácter" para jugar un fútbol de posición, posesión y precisión y conseguir la mayor velocidad de ejecución posible. "Lo más difícil", dice Benaiges "es encontrar delanteros, porque es donde se necesita más talento. A la habilidad y rapidez hay que añadir instinto goleador". Y, consciente de que el Barça produce sobre todo medios, añade: "Para jugar como centrocampistas tienen que ser inteligentes y con buena técnica. Cada vez nos salen más oertimos a medios en defensas".

Iván Torreblanca tiene siete años y juega en el prebenjamín. Quiere ser futbolista. De momento, ya tiene sello puesto: D. O. La Masía.

Víctor Sánchez en su debut el domingo en San Mamés.
Víctor Sánchez en su debut el domingo en San Mamés.REUTERS

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_