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Reportaje:

La fórmula contra el estilo

Florentino Pérez convertirá a José Mourinho en el técnico mejor pagado en la historia de la Liga para acabar con la hegemonía del Barça - Guardiola, Messi, Xavi y Pedro, los mejores para los entrenadores de Primera

Ramon Besa

A la espera del Mundial, la temporada de fútbol se ha cerrado en el Bernabéu con la coronación del Inter como campeón de la Champions. El equipo italiano ha sido una trituradora de entrenadores y jugadores, hasta el fichaje de José Mourinho, un técnico cuyo impacto mediático y futbolístico guarda un cierto paralelismo con el de Helenio Herrera, el último entrenador con el que el equipo neroazzurro había alcanzado la Copa de Europa (1965). Massimo Moratti fichó a Mourinho para ganar la Liga de Campeones. Conquistado el trofeo, ambos se sienten liberados para continuar su camino, al punto de que el técnico ni siquiera viajó a Milán con el equipo para festejar el triunfo sino que permaneció en Madrid.

Al técnico portugués se le contrata para ganar, no para mejorar la cultura futbolística
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A Mourinho le disgusta el calcio y al fútbol italiano se le hace insoportable el portugués. Nada nuevo, por otra parte, si se atiende a las trifulcas que ya tuvo Mourinho con los rivales del Chelsea. La Premier League tampoco le debe nada al todavía técnico del Inter. A Mourinho se le contrata para ganar títulos y no para formar equipos o mejorar la cultura futbolística. Funciona a corto plazo, para cuestiones concretas, y prefiere trabajar con mercenarios antes que con promesas. Acaba de reunir el triplete con una plantilla de futbolistas que no quisieron clubes como el Madrid o el Barça y sin ningún italiano en la alineación. El dinero obtenido por el traspaso de Ibrahimovic le permitió destronar a los azulgrana y eliminar también al Chelsea.

Ibrahimovic abandonó el Inter para ganar la Copa de Europa con el Barcelona y se ha encontrado con que el equipo italiano ha conquistado el scudetto, la Copa y la Champions mientras los azulgrana se han quedado con la Liga. El fútbol mundial parece rendido a la fórmula Mourinho, personal e intransferible, en la línea de Fabio Capello, a gusto también con un fútbol de autor que les va igual de bien a los italianos que a los españoles o a los ingleses.

La trayectoria de Mourinho es tan triunfal que ha acabado por seducir a Florentino Pérez. Aunque el Madrid siempre ha sido un equipo de jugadores más que de entrenadores, ahora necesita comprar un entrenador de éxito después que no le haya bastado con invertir más de 250 millones en jugadores. El presidente del Madrid necesita a Mourinho y ninguna oferta puede motivar más al portugués que la del club blanco. A Mou, despedido de mala manera en el Barça y recibido en cada una de sus visitas al Camp Nou al grito de "traductor" o "actor", se le pide que acabe con la hegemonía azulgrana en la Liga, el trabajo perfecto para un técnico que sólo atiende a su manual y se motiva ante los retos más complicados.

Guardiola sólo ha perdido dos trofeos desde su llegada hace dos años al banquillo, y ha sido frente a los dos conjuntos que finalmente han sido campeones: el Sevilla en la Copa y el Inter en la Champions, de manera que el reto para la próxima temporada se presenta "divertido" para utilizar la misma terminología anunciada por el entrenador barcelonista.

A diferencia de Mourinho, Guardiola ha convertido a su equipo en un referente futbolístico por su juego. La gent blaugrana le siente tan culé que le vería como el mejor presidente. Los azulgrana han batido los distintos registros del campeonato después de un mano a mano histórico con el Madrid. Los entrenadores de la Liga han señalado a los barcelonistas como los mejores en la encuesta que anualmente organiza EL PAÍS. Messi, Xavi, Pedro y el propio Guardiola han sido distinguidos como el mejor extranjero, español, revelación y entrenador, respectivamente, circunstancia que expresa la admiración que despierta el Barça. "El fútbol pertenece a los futbolistas", afirma Guardiola. "Mourinho es uno de los grandes sino es el más grande", añade Tito Vilanova, "pero a nosotros nos interesa otra cosa: atacar con gente de la cantera".

Azulgrana e interista, Guardiola y Mourinho han ganado las dos últimas Copas de Europa por el mismo resultado, 2-0 y, sin embargo, por caminos opuestos: unos no quieren el balón y los otros lo necesitan. Los dos han progresado por líneas paralelas y ahora se encontrarán en la Liga. Así las cosas, Mourinho aparece como el mejor de los pistoleros y Guardiola aspira a ser El hombre que mató a Liberty Valance.

José Mourinho y Pep Guardiola, durante el partido de vuelta Barça-Inter en las semifinales de la Liga de Campeones.
José Mourinho y Pep Guardiola, durante el partido de vuelta Barça-Inter en las semifinales de la Liga de Campeones.REUTERS

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Sobre la firma

Ramon Besa
Redactor jefe de deportes en Barcelona. Licenciado en periodismo, doctor honoris causa por la Universitat de Vic y profesor de Blanquerna. Colaborador de la Cadena Ser y de Catalunya Ràdio. Anteriormente trabajó en El 9 Nou y el diari Avui. Medalla de bronce al mérito deportivo junto con José Sámano en 2013. Premio Vázquez Montalbán.

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