El mayor reto del 'cabezón'
Onésimo, famoso como jugador por su regate, se hace cargo del Valladolid
José Luis Mendilibar fue destituido ayer como entrenador del Valladolid después de dejar "una huella de trabajo honrado y calidad humana". Le sustituye Onésimo Sánchez González (Valladolid, 1968), hasta ayer entrenador del filial, que sólo ha perdido un partido y es líder del Grupo VIII de la Tercera División. "Ha sido una promoción interna", afirmó Carlos Suárez, el presidente del club, al referirse al inolvidable extremo de cabellera rizada; "le he dado muchas vueltas. Espero que Mendilibar me entienda".
Onésimo es sobre todo un hombre de club, un ex jugador que se distinguió por su capacidad para el regate, una suerte a la que dio un toque muy personal: la cabeza gacha, el giro sobre sí mismo, como una peonza, para sortear rivales en una baldosa, aunque nunca alcanzó la gloria a la que parecía llamado. Hijo de un camionero y el menor de siete hermanos, futbolista de calle -"he jugado al fútbol hasta con botellas de lejía, como todo el mundo"-, menudo, cabezón y pícaro dentro y fuera del campo, formó parte del recordado Valladolid juvenil entrenado por Javier Yepes, que llenaba los domingos por la mañana la tribuna principal del viejo Zorrilla. Debutó en Primera a los 17 años y, desde entonces, paseó por el fútbol español su imán en los borceguíes hasta 2002.
Ganó 10.000 pesetas por ir del Camp Nou al Miniestadi sin que se le cayera la pelota
En el Valladolid jugó dos temporadas hasta que fue cedido al Cádiz. Johan Cruyff reparó en Onésimo cuando vestía de amarillo y le contrató para la temporada previa (1989-90) a la explosión del dream team del Barça. Aunque sólo jugó un año en el Camp Nou, dejó huella en el vestuario por divertido -nadie ha vuelto a contar los chistes con su gracia- y por una gesta: una mañana se jugó 10.000 pesetas contra todo el que quisiera apostar que era capaz de ir del Camp Nou al Miniestadi sin que se le cayera la pelota de los pies. Fue, volvió, cobró e invitó a comer a sus compañeros. La hinchada, sin embargo, le recuerda especialmente por la forma como revolucionó una eliminatoria de la Recopa contra el Anderlecht, ganada en la prórroga por el conjunto belga.
Más tarde recaló tres años en el Rayo Vallecano, en el que le bautizaron como La Chincheta y le recuerdan por el gol de la permanencia en Primera. Jugó en el Sevilla (1996-1997) y, tras un año casi en paro, en el Burgos (1990- 2000) para retirarse en el Palencia (2000-2002). Ya de entrenador, dirigió al Valladolid B, llevó al Huesca a Segunda -su mayor éxito- y la pasada temporada regresó al filial pucelano en sustitución de De la Fuente.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
Roban la caja fuerte del famoso ‘Camión de los regalos’ de la lotería de Extremadura: “Me la han liado”
El momento en el que una manga marina toca tierra en Mazarrón provocando daños materiales en el mobiliario urbano
Kim Kardashian desata la polémica tras regalar un perro a cada uno de sus cuatro hijos por Navidad: “Los cachorros no son peluches”
Enrique de Inglaterra y Meghan Markle buscan nuevo jefe de prensa: dimite su undécima publicista en cinco años tras 10 meses en el puesto
Lo más visto
- Europa entra en estado de alerta ante la embestida estratégica de Trump
- ¿Qué pasa si uno solo de los ganadores del Gordo de Villamanín decide denunciar?
- La larga sombra del hijo único: China paga con una crisis demográfica su mayor experimento social
- Los grandes derrotados del Gordo de Navidad de Villamanín, 15 jóvenes de entre 18 y 25 años: “Hoy hemos perdido amigos”
- El giro del PP con Vox: de prometer no gobernar con la extrema derecha a normalizarlo tras el resultado en Extremadura




























































