_
_
_
_
_
Entrevista:EUROCOPA 2008

"Hasta yo mismo me lío"

Rehhagel, el técnico de Grecia, dice que ni él sabe cómo van a jugar contra Suecia

Otto Rehhagel no engaña a nadie. Promete la misma forma de jugar de Grecia hace cuatro años, cuando conquistó por sorpresa la Eurocopa. Resultados ajustados, pocos goles, muchos intentos de contragolpe... Partidos anodinos. Sus ruedas de prensa, en cambio, son un espectáculo. Entre el guirigay de los periodistas griegos y el carácter volcánico del técnico alemán, de 69 años, nunca faltan momentos entretenidos. Ayer, en Salzburgo, tiró de sentido del humor. "Si habéis visto mi entrenamiento, entreno de tal forma que yo mismo me lío y no sé cómo voy a jugar", les dijo a los reporteros. Y también, de la soberbia de quien cuenta con un título a sus espaldas. "No jugaremos como los polacos, cuyos defensas decidieron de pronto regalar 30 metros a los alemanes para marcar", dijo en alusión al primer gol de Podolski. "Si eso fue una trampa moderna del fuera de juego, también resultó una manera moderna de perder por 2-0", añadió provocando las risas de la audiencia en un ataque furibundo a su colega Leo Beenhakker, el holandés que dirige a Polonia. ¿Había cuentas pendientes?

Selección Griega
Suecia en la Eurocopa

Gato viejo, Rehhagel, que lleva a la selección helena desde 2001, quiso a continuación quitarse la presión de encima: "Los favoritos son los de siempre: Italia, Francia y España. A veces, muy pocas veces, un outsider gana el torneo. Unos pocos metros, unos pocos segundos, pueden decidir un partido". Por último, preguntado por su estado anímico, replicó: "Siempre estoy bien. Tengo salud, una buena familia y estoy casado con mi esposa, Beate, desde hace 43 años". Más risas. Lo dicho: un espectáculo.

Mientras tanto, por la zona mixta iban desfilando los jugadores griegos con la lección aprendida. "¿Que no nos tienen en cuenta? Bueno, es la misma canción de hace cuatro años. A ver si sucede lo mismo". El zurdo Amanatidis, mediocampista del Eintracht de Francfort, avisaba de lo que está dispuesta a hacer Grecia en esta Eurocopa: dar la sorpresa. "¿Nadie nos da como favoritos?", se preguntaba retóricamente Samaras, el joven delantero del Celtic de Glasgow; "somos un equipo sin egos. Somos una familia y tenemos una gran confianza, que es lo más importante en esta clase de torneos". Espíritu de equipo, egos a ras de suelo, orgullo por las nubes... Todo lo que les llevó al triunfo en Portugal 2004.

De seis veces, Suecia sólo ha vencido una vez a Grecia. De eso hace 88 años. Fue en los Juegos Olímpicos de Amberes, en 1920, cuando España conquistó la medalla de plata. A Suecia le preocupa el estado físico de su principal estrella, el delantero Ibrahimovic, con la rodilla hinchada durante buena parte de la temporada. Aun así, su seleccionador, Lars Lagerback, apela a los genes especiales de su delantero predilecto. "Comparado con los otros jugadores, está más preparado para disputar los 90 minutos", pregona.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_