_
_
_
_
_
Entrevista:JOAN PLAZA | Entrenador del Real Madrid

"No nos derrumbamos nunca, remamos hasta el final"

Joan Plaza (Barcelona, 26 de diciembre de 1963) vive su tercera temporada como entrenador del Madrid, con el que comienza el asalto a una Copa del Rey que hace 16 años que no ganan los blancos. Lo hace en racha: diez victorias sobre rivales importantes, algunas con épicas remontadas. La más reciente, el sábado pasado, frente al intocable Tau.

Pregunta. Los buenos resultados han llegado en el momento ideal. Ya se oían ruidos de sables.

Respuesta. La temporada pasada aprendimos una lección. Logramos un montón de records, ganamos a un equipo de la NBA y eso no sirvió luego para nada. En ésta, aun a riesgo de jugarme el puesto, creímos que lo mejor era llegar bien a la época importante, febrero-marzo, y a ello se encaminó la carga física y la táctica. Tras las primeras derrotas, cuando explicábamos los planes, parecíamos el loco de la colina vendiendo humo. Pero hay una hoja de ruta desde el principio. Me gusta que no nos haya influido el entorno mediático, que en algún caso ha dudado de nuestra capacidad.

P. ¿Cómo le sienta lo de equipo milagro?

R. Evidentemente, no es algo premeditado. Hablando ayer con mi padre, le recordaba que, cuando era pequeño, me solía decir que si algo tenían los madridistas es que peleaban hasta el final. Que podían perder, pero eran capaces de remar hasta el último minuto. Los jugadores y yo mismo hemos sido capaces de impregnarnos de esto. No nos derrumbamos nunca.

P. Habrá alguna razón para que la dinámica se repita tanto.

R. Lo que intento es implicar a todos los jugadores que vamos a necesitar si queremos ganar algún título. Esto incluye a gente que lleva menos tiempo, por lo que pueden producirse algunos desajustes, algún tránsito anormal en el partido. Pero buscas que tengan un protagonismo que al final vamos a precisar.

P. Parece existir demasiada diferencia entre la primera y la segunda unidad de su equipo.

R. No era la idea inicial. Querríamos haber integrado ya totalmente a la gente nueva. Tenemos una columna vertebral definida desde hace años con jugadores que saben a qué jugamos, dónde estamos, qué camiseta defendemos, y los nuevos aún no lo han gestionado bien. También hay otras cosas. Massey, con Hervelle lesionado, era el tercer anotador y el segundo en minutos, pero, a su vuelta, sus capacidades no las estamos traduciendo bien en la pista. Hosley ha alternado partidos de crack con otros de una discreción sublime. Estamos haciéndoles comprender que sin ellos no podemos competir. Que necesitamos a un Tomas más regular, que Van der Spiegel nos ayude más... Por eso repartimos el tiempo. Pero tienen que adaptarse.

P. Falta les hace, pues se cuestionan mucho los fichajes desde que ganó su primera Liga.

R. Con Papadopoulos creíamos haber acertado. Pero hasta que abres el melón no sabes si es bueno. Todos fuimos culpables. Él, sus compañeros, el club, la ciudad... No logramos que se ajustara. Con la nueva hornada pretendimos jugadores que se adaptaran no sólo deportivamente. Teníamos un cuestionario: que fueran afables, que entendieran su pepel en el equipo... No se les fichó sólo por ser buenos, sino porque creíamos que se ajustarían bien a nuestra columna. Y con Pepe Sánchez buscábamos un base complementario de Raúl. Ocurre que el crecimiento de Llull ha modificado un poco la situación.

P. Ese chico tiene ángel.

R. Sin duda. Es algo que no se enseña: se tiene o no se tiene. Nos ha ganado a todos por esa capacidad, por cómo disfruta jugando, por su descaro, por ser generoso en el esfuerzo... Esto ha hecho que alguna vez nos hayamos agarrado a él para levantar un resultado. Lo mejor de Llull está en su cabeza, muy bien amueblada. Otra clave ha sido poder crecer lentamente. Vino hace dos años y medio. Pudo aprender con Raúl y Tunceri y ahora con Sánchez. Ha absorbido todo lo que ha podido de ellos. Y ha sabido aprovechar la oportunidad que se le ha dado.

P. ¿Y usted cómo está?

R. Cansado [risas]. Estoy viviendo todas las caras de ser entrenador del Madrid. Me encuentro sólido en el equipo y con ganas de seguir [su contrato acaba en 2010]. Si ganásemos algo esta temporada, lo disfrutaría más que la primera.

P. ¿Se siente reconocido?

R. El banquillo del Madrid quema. Muchas gente lo desea y se crean necesidades de cambio. Además, yo no soy una persona generosa en titulares ni grandes historias. Pierdes el primer partido de la Liga, ante el Unicaja, y parecía que habíamos perdido diez. Pero me he mantenido bastante fiel a mi guión y cuatro o cinco meses después estamos más o menos donde queríamos.

Joan Plaza
Joan PlazaULY MARTÍN

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_