Los objetivos del Madrid

Mou no quiere hablar de la Liga de Campeones. "Estoy sancionado. No puedo trabajar y si no puedo trabajar tampoco puedo comentar. No quiero decir absolutamente nada que tenga que ver con competiciones de la UEFA ni con el último partido en Zagreb". Mou tampoco quiere hablar de Cristiano Ronaldo, de si está o no suficientemente protegido por los árbitros. "He hablado ya de este tema hace mucho tiempo y no voy a hablar otra vez". Mou no quiere hablar de nada y al final acaba hablando de todo, incluso del partido del miércoles. Aunque sea desde el punto de vista "de un espectador más". Así dijo sentirse en uno de los palcos de Zagreb mientras cumplía uno de los dos partidos de sanción que le quedan.

En Valencia, ante el Levante, con su césped alto y seco, jugará Cristiano

El técnico del Madrid contestó ayer irónicamente a Pep Guardiola -"nuestro objetivo es la permanencia", dijo-, se quejó del césped del campo del Levante, su rival hoy, repasó los problemas de su equipo, negó que fueran de tipo defensivo y restó mérito al trabajo de Iker Casillas. "Entre estar Casillas en la portería o estar yo, no habría una gran diferencia", dijo el técnico analizando el partido de Champions del miércoles. El capitán del Madrid salvó al equipo de un error defensivo en la primera parte cuando se encontró solo delante de un jugador del Dinamo. "Casillas ha hecho una parada en 90 minutos. Hablar de defender mal y tener problemas atrás en un partido en el que Iker ha llegado con su equipación amarilla y se ha ido con la misma equipación amarilla sin manchas de sudor y de hierba, me parece un poquito absurdo. No le he visto hacer ni una parada", prosiguió el portugués. Fabio Capello, en su día, se refirió en más de una ocasión al trabajo de Casillas utilizando el término "paraditas".

Mourinho dice que el problema del Madrid -excluyendo la goleada en el campo del Zaragoza, a los blancos les costó imponer su ritmo contra Getafe y Dinamo de Zagreb- son "los altibajos de concentración". "Eso se traduce en ser más o menos compactos en la fase defensiva", dijo. "El sábado, cuando perdíamos el balón, los jugadores más ofensivos se quedaban demasiado arriba sin juntar las líneas y cuando atacábamos, los de atrás no compactaban con los de arriba".

Pese a ello, y Supercopa aparte, desde que ha empezado la temporada el Madrid cuenta los partidos por victorias. Suma seis puntos en Liga. Demasiados pocos para José Mourinho. O al menos eso dijo cuando le preguntaron por el clima de pesimismo que parece rodear el Barcelona de Guardiola, quien el viernes dijo que lo normal es que este año los suyos no ganen ningún título. "Nosotros vamos a pelear para no jugar la Liga Adelante. A ver si hacemos 40 puntos y la próxima temporada seguimos en Primera", contestó irónico el portugués. Hoy le espera el Levante. El año pasado no consiguió ganar en su campo en la doble visita de Liga y Copa. "¿Qué si la Liga pasa por no perder puntos en los campos modestos? Pues no creo que sea posible sumar todos los partidos. Puntos se van a perder, es una misión imposible no perderlos", argumentó Mourinho antes de quejarse del césped. "Sabemos que el Levante defiende mucho y bien y que juegan en su casa, donde pueden, dentro del reglamento, tener el campo sin agua y con el césped más alto de lo normal". Justo en en esas condiciones -sin regar y alto- estaba el terreno del Santiago Bernabéu cuando recibió al Barcelona en la ida de las semifinales de Champions.

Para hoy el técnico podrá contar finalmente con Cristiano Ronaldo y el recuperado Kaká. Deja fuera, sin embargo, a Albiol, con anginas, y a Granero, por decisión técnica. Por si había alguna duda, ayer dejó claro que seguirá en la línea de no rotar.