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Entrevista:JOSÉ MANUEL PINTO | Portero del Barcelona | COPA DEL REY | Ida de los cuartos de final

"Si te pones un límite, nunca vas a crecer"

José Manuel Pinto Colorado (Puerto de Santa María, Cádiz; 1975) llegó al Barcelona como un recambio de emergencia. Iba a estar seis meses y lleva cinco años, en los que se ha ganado el respeto de su entrenador, el de sus compañeros y la amistad de Messi. Pep Guardiola le confirmó ayer como portero titular esta noche ante el Madrid. Así que volverá a jugar hoy en el Bernabéu, donde no actúa desde 2006, un escenario a cuyo terreno de juego ha saltado cinco veces y en el que ha ganado dos con el Celta. Recién terminado el partido contra Osasuna hace una semana, camino de la cena, llenaba de carcajadas la charla.

Pregunta. Real Madrid, 1; Celta, 0. ¿Lo recuerda?

Respuesta. Muy vagamente. Suelo mirar adelante. Así que no tengo excesiva memoria para los partidos. Recuerdo que aguantamos bien y que, al final, decidió Raúl con un gol de falta. No recuerdo mucho más. ¿Eso en qué año era?

"¿Titular hoy ante el Madrid? Un orgullo y un premio a la constancia
"Lo doy todo, de corazón y sin esperar nada a cambio. eso me llena"
"Soy potente porque, de pequeño, tenía complejo de bajito y decidí saltar mucho"
"El meta, en el Barça, es un jugador más. Me lo propuse y conseguí serlo"
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Un clásico de entretiempo

P. La temporada 1999-2000...

R. ¡Bufff! ¡Era un chaval! Pero he jugado más veces...

P. Sí, en el Bernabéu, con el Celta, en cinco ocasiones: derrotas por 3-0 en la 2000-2001 y 4-2 en la 2003-2004 y victorias por 2-3 en la 2005-2006 y por 1-2 en la 2006-2007.

R. En una hubo un gol fantasma, una jugada que dio en el larguero... No sé... Algo raro pasó... Recuerdo que aquellos años el Celta estuvo a un nivel impresionante y terminamos metidos en la Champions.

P. ¿Qué sensaciones le genera el Bernabéu? ¿Es especial?

R. Especiales son todos los campos. Cada uno tiene su toquecito... En Andalucía me gusta jugar porque animan mucho, son más calientes; Bilbao es pasión y en Madrid también se vive mucho. Pero el Bernabéu tiene su cosa, claro. Aunque nadie me ha dicho que vaya a jugar.

P. ¿Y si juega?

R. Guardiola decidirá lo mejor para el equipo. Para mí, sería un orgullo y un premio a la constancia.

P. ¿Juega por simpático, por ser amigo de Messi?

R. Mire, paso de ese tema. El Trofeo Zamora no me lo dio Messi, ni vine por Messi ni renuevo el contrato por Messi... Leo es muy amigo mío, pero el que diga eso no me conoce. Así que me afecta poco. El problema lo tiene el que piensa algo así, no yo.

P. Dice Valdés que admira su potencia.

R. Trabajada está. Desde muy pequeño, tenía complejo de bajito. Decidí que, si era bajito, tenía que saltar mucho. Así que trabajé mucho ese aspecto. Lo sigo haciendo.

P. ¿Sigue vendándose el dedo meñique de la mano izquierda? ¿Es cierto que jugaba con un guante con solo cuatro dedos?

R. Sí, por el meñique [muestra un dedo quebrado], pero lo fortalecí tocando la guitarra.

P. ¿Toca la guitarra?

R. Sí, la clásica y la eléctrica. Fin del tema música [se ríe]. Ahora me vendo los dedos anulares. Pero no acostumbro a hacerlo. Es algo esporádico. Las muñecas, sí. Siempre las protejo. ¡Es que chutan muy fuerte!

P. Pues prepárese... Suele decir Valdés que, cuando sale al Bernabéu, tiene la misma sensación que en San Mamés: está seguro de que tendrá mucho trabajo. ¿Le pasa lo mismo?

R. Hombre, vamos a tener trabajo. Estamos enfrentándonos los dos equipos más en forma de la Liga y, probablemente, de todas las Ligas. El equipo es consciente de eso. Pero luego te viene otro y te genera más ocasiones, nunca sabes. Eso depende de la manera de jugar. El Madrid ataca muy bien, tiene contra, es muy directo, genera muchas ocasiones y mete muchos goles porque, claro, cuantas más generas más posibilidades.

P. ¿Cambia el ritual ante partidos importantes?

R. No. Suelo hacer lo mismo. Me gusta leer. Me hace concentrarme. Como, leo un poco y me echo una siestecita, que luego necesitas las fuerzas... Es como el descanso del guerrero antes de la batalla. Después me doy una duchita, leo un poco más... ¿Musica? De camino al campo, la que suena en el autobús. Y en el vestuario siempre hay un iPod con las canciones habituales antes de los partidos. Hay de todo. Cada uno aporta la suya... Pero, básicamente, lo que más me ayuda a concentrarme es la lectura. Estoy leyendo Ahora yo, un poco de la filosofía que llevo. Ya sabe, el tema del karma...

P. ¿Y el karma cómo lo tiene?

R. Lleno de energía.

P. Sostiene Mascherano que lo suyo tiene un mérito tremendo desde el punto de vista mental.

R. La clave es mantener las ganas de aprender, la ilusión y la esperanza siempre. Cuando me falte esto, se acabó. Pase lo que pase y la edad que tengas, si uno quiere, siempre mejora. Si te pones un límite, nunca vas a crecer ni a mejorar.

P. ¿Es una cuestión de ambición?

R. No, es afán de superación. Y no solo en el terreno profesional. Es una cuestión vital. Siempre trato de dar un poco más de mí en el proceso de crecimiento, como persona sobre todo. Pero, a fin de cuentas, en eso se incluye la profesión de portero.

P. ¿Siempre fue tan reflexivo? De joven, ¿ya era así o se lo ha dado la edad?

R. ¿De joven? No me acuerdo. ¡Hace tanto tiempo!

P. ¿No recuerda qué le decía su madre?

R. ¡Mi madre qué va a decir! ¡Que soy el más guapo! [se ríe a carcajadas]. Mi madre está orgullosa, hombre...

P. ¿Y usted está orgulloso?

R. Sí, porque lo doy todo, y siempre con todo el corazón, y no espero nada a cambio. A mí eso me llena. Estoy orgulloso de mis ganas de ayudar.

P. ¿En el campo es igual que fuera o se transforma y es más impulsivo?

R. A veces, soy más impulsivo. Otras, lo pienso mucho. Depende. Pero es una línea de vida. Igual que soy como profesional soy en casa. No hay dos Pintos, ¡Ojalá! ¡Pararía más con cuatro manos! [se carcajea].

P. ¿Las manos? Contra Osasuna, en el partido de ida, tocó la pelota 16 veces con los pies antes de usar las manos.

R. Es normal. En el Barcelona utilizamos al portero como un jugador más. Entendemos que es una opción más para empezar a atacar. Somos 11 jugadores, no 10 más uno que juega a otra cosa.

P. Pero, en su caso, ha tenido que adaptarse. No ha trabajado así desde joven. Cuenta Xavi que fue sorprendente...

R. ¿Qué ha dicho Xavi?

P. Que, cuando le vio el primer día en el rondó, pensó que no lo conseguiría, pero que su evolución ha sido impresionante y que le sorprendió mucho ver cómo logró mejorar día a día...

R. Me propuse conseguirlo y lo hice. Uno nunca acaba de aprender. Y yo siempre quiero aprender y mejorar. Por eso me fijo mucho.

P. ¿Qué admira de Casillas?

R. Lo suyo es innato. Esa capacidad de reacción se tiene o no se tiene. La ha trabajado, claro. Si no hubiera trabajado, no estaría donde está, pero esos reflejos... ¡Ufff!

Pinto, en un partido de pretemporada.
Pinto, en un partido de pretemporada.CORDON

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