La última curva del 'caso Contador'

El mundo del ciclismo sigue su ritmo habitual, y en enero toca la salida del letargo. Se presentan nuevos equipos, nuevos maillots, nuevos nombres -Leopard, Movistar, Europcar-; el pelotón se prepara para ponerse en marcha en carreras en Australia y en Argentina, en el verano austral; la Vuelta anunciará su recorrido el próximo miércoles; y el caso Contador, cuyo equipo, el Saxo Bank, se concentrará dentro de 10 días en Fuerteventura, sigue su laberíntico recorrido de despacho en despacho. El último giro, que alargará un poco más su primera resolución, se produjo días pasados, cuando el Comité de Competición de la federación española decidió enviar a la Unión Ciclista Internacional (UCI) y a la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) los documentos y los estudios científicos que constituyen el núcleo de las alegaciones de Alberto Contador para explicar cómo los 50 picogramos de clembuterol hallados en su orina en un control del pasado Tour se explican por la ingestión de carne contaminada.

"La UCI y la AMA tardaron semanas en pasarnos la patata caliente para que decidiéramos sobre Contador y nosotros hemos pensado que son ellos los que deben mojarse", explican fuentes cercanas a la federación para justificar esta ligera subversión de los procedimientos, pues el reglamento de la UCI señala que corresponde a las federaciones nacionales la primera instancia de la justicia deportiva y que posteriormente, si no están de acuerdo con el fallo, la internacional se reserva su derecho a recurrir al Tribunal Arbitral del Deporte (TAS). "Si la UCI y la AMA, tras estudiar los documentos presentados por la defensa de Contador, deciden que hay que sancionar, sancionamos; si deciden lo contrario, no sancionamos", añaden en la federación.

El ciclista de Pinto, que cumple una suspensión provisional desde el 24 de agosto pasado, podría ser sancionado con entre tres meses y dos años. "Así, no solo no nos podrán acusar de que juzgamos dejándonos guiar por un supuesto patriotismo, sino que podemos acortar el procedimiento, ya que si la UCI y la AMA están de entrada de acuerdo con nuestra decisión, no recurrirán ante el TAS". Quien sí recurriría ante el TAS, si la decisión no le satisface, sería el propio Contador. Mientras la AMA aún no ha respondido a la solicitud de la española, la UCI ha contestado que estudiará la documentación y que responderá el 23 o el 24 de enero. La documentación también ha sido mandada a la Agencia Estatal Antidopaje Española.

Nunca, ni en España ni en otro país, se había tomado una medida así por una federación.