_
_
_
_
_
Reportaje:

La crisis de los alimentos desata un 'boom' inversor

Crece la oferta de fondos dedicados al sector agrícola

Cristina Galindo

La crisis de los alimentos ha disparado el precio de productos básicos como el arroz y ya ha provocado disturbios en una veintena de países. Pero también se ha convertido en todo un negocio para los inversores. Los grandes fondos están dirigiendo miles de millones de euros a los mercados de futuros de materias primas para comprar maíz, trigo o soja, mientras está surgiendo un boom de fondos que invierten exclusivamente en compañías cotizadas del sector agrícola: desde productores de fertilizantes a fabricantes de maquinaria y propietarios de tierras de cultivo.

"Hay valor en la agricultura", afirma Diego Fernández Elices, director de selección de fondos de A&G. "Es una idea de inversión atractiva a largo plazo debido al gran crecimiento de la demanda mundial y una oferta limitada", añade. Tanto los fondos de renta variable que invierten en compañías cotizadas relacionadas con el sector como los que invierten directamente en futuros de materias primas acumulan ganancias en el año, frente al 12% que ha perdido el Ibex desde enero. Eso sí, los expertos avisan de que este mercado puede ser muy volátil.

Mientras el Ibex acumula pérdidas, los fondos agrícolas siguen ganando

Con las turbulencias que azotan los mercados en la actualidad, la agricultura se ha convertido en una inversión alternativa y atractiva: algunos de estos fondos registran rentabilidades superiores al 30% en un año, frente a una subida en ese periodo del 5,8% del índice MSCI World, una de las referencias para el mercado de fondos.

La especulación con los alimentos está considerada, de hecho, una de las causas de la actual crisis, que ha provocado que en el último año el arroz se haya encarecido un 70% y el precio del trigo se haya duplicado. La expectativa de que la tendencia se mantenga durante la próxima década alienta aún más a los inversores a seguir apostando por el sector.

Pero ahora las apuestas son cada vez más audaces y a más largo plazo. En Estados Unidos, algunos grandes fondos han comprado cientos de hectáreas de tierras de cultivo (muchas veces de biocarburantes), han levantado almacenes para guardar la cosecha y han invertido en compañías de fertilizantes que salen a Bolsa aprovechando el tirón. Muchos se preguntan qué pasará con esos campos cuando el maíz deje de ser rentable para el mercado.

De momento, la demanda no deja de aumentar. El dinero invertido a través de fondos en productos como maíz, soja y trigo alcanza 47.000 millones de dólares (32.000 millones de euros), frente a 10.000 millones de dólares de 2006, según AgResource. La creciente hambre por todo lo relacionado con los alimentos forzó a Schroders en febrero a cerrar un fondo agrícola a nuevos inversores.

Varias entidades están preparando la comercialización de nuevos fondos agrícolas. Cada vez hay más productos para elegir. En España, hay varios fondos registrados que invierten en compañías agrícolas, como DWS Agricultural Business, Rodeco Agri & Food y Allianz RCM Global Agricultural Trends, explica Diego Fernández. Otros como DB Platinum Agriculture Fund y Parworld Agriculture invierten en mercados de futuros.

Las salidas a Bolsa se multiplican. En los últimos cuatro años ha habido 35 operaciones públicas de venta de compañías del sector agrícola en el mundo, que han supuesto ingresos por 3.000 millones de dólares, según Dealogic. De ese total, 15 salidas se produjeron el año pasado y representaron dos terceras partes del valor total. Las mayores operaciones se produjeron en el mercado bursátil brasileño: Agrenco, que financia negocios agrícolas, y LAEP, que invierte en el sector lácteo.

"Creemos que los precios de los alimentos van a seguir altos, aunque probablemente no veremos subidas tan fuertes como las del último año", comenta David Donora, especialista en materias primas de la firma británica de inversión Threadneedle. "Entre las oportunidades más interesantes a largo plazo está la inversión en productos para generar biocarburantes que no compitan directamente con los alimentos", afirma.

El equipo gestor de materias primas de Schroders prevé más subidas de la soja y el maíz. Su producto favorito es el café, por los reducidos inventarios y el aumento del consumo. -

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Cristina Galindo
Es periodista de la sección de Economía. Ha trabajado anteriormente en Internacional y los suplementos Domingo e Ideas.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_