Algo está cambiando

La percepción del mercado con respecto a España está cambiando. Cuando se produjeron las crisis de Grecia e Irlanda los inversores desataron una oleada de órdenes de venta sobre la Bolsa y la deuda pública españolas. Descontaban un efecto dominó que acabaría llevándose por delante a nuestra economía. Esta semana, en cambio, la crisis política de Portugal, con dimisión incluida de su primer ministro, José Sócrates, no ha tenido apenas repercusión en los activos españoles, más bien al contrario, ya que el Ibex 35 acumuló una revalorización semanal del 3,69%.

Es cierto que Lisboa todavía no ha decidido acogerse al programa de rescate económico de la Unión Europea, pero la exposición que tiene España a Portugal (tanto pública como privada) habría sido argumento más que suficiente hace unos meses para que los grandes fondos deshicieran posiciones en acciones y bonos españoles.

En lo que va de año, el Ibex 35 acumula una revalorización del 8,63%. Es cierto que los inversores están corrigiendo el fuerte castigo que sufrieron los valores del índice en 2010 (un año positivo para el resto de Bolsas), pero también hay que tener en cuenta a la hora de valorar en su justa medida esta subida bursátil el difícil arranque de año para los activos de riesgo: revueltas en Túnez y Egipto, conflicto armado en Libia, terremoto, tsunami y amenaza nuclear en Japón, crisis en Portugal...

En cuanto a la deuda pública, la reacción del mercado también ha significado un voto de confianza a la economía española. La prima de riesgo (diferencial entre la rentabilidad del bono español a diez años frente al bono alemán) ha caído en la semana desde 197 puntos básicos a 189 puntos.

El mejor valor de la Bolsa en la semana fue Inditex. La compañía textil presentó sus resultados anuales con un incremento del 33% en el beneficio neto. Una vez más Inditex fue capaz de sorprender a propios y extraños con unas cuentas que parecen ajenas a la situación económica actual y a factores tan relevantes para algunos de sus comparables como son la subida de las materias primas (principalmente algodón) y la inflación de los costes de producción en Asia. "Son los extraterrestres de la distribución", como les definen los analistas de Banco Sabadell.

Otro de los protagonistas individuales de la semana fue Repsol. La petrolera ha comunicado nuevas desinversiones en YPF. Desde el pasado mes de noviembre, la compañía que preside Antonio Brufau ha vendido un 15% del capital de su filial argentina entre diferentes inversores.

La semana en el mercado de divisas ha sido relativamente tranquila. El euro se ha depreciado ligeramente frente al dólar, aunque el tipo de cambio se mantiene por encima de 1,4 dólares. Por su parte, el yen ha frenado su revalorización tras la intervención del G-7. Por lo que se refiere al petróleo, el precio del barril de crudo Brent ha pasado de 113 dólares a 115 dólares. -