El BCE critica el plan español para reducir el déficit por inconcreto

España ha prometido reducir el déficit a un ritmo algo superior al exigido por Bruselas, en un mensaje claramente dirigido a los mercados financieros, pero sin concretar cómo. El Banco Central Europeo (BCE) reclamó ayer que el Gobierno defina las herramientas que empleará para atajar los desequilibrios fiscales. En su boletín de marzo, la autoridad monetaria constata que la previsión del Ejecutivo (reducir el déficit 1,8 puntos de PIB como media anual) se ajusta a lo que fija Bruselas. Con un importante reparo: "Este objetivo no se ha visto plenamente respaldado por medidas concretas, especialmente para el periodo 2011-2013".

No es la primera vez que el BCE amonesta directamente a un país por alguna deficiencia relativa a su política fiscal, pero no se trata, ni mucho menos, de algo habitual en el quehacer del eurobanco. Y sin embargo, fuentes del Ministerio de Economía replicaron ayer que sí existen medidas concretas en los planes remitidos a Bruselas.

Economía responde que sí hay medidas fiscales y de recorte del gasto

El boletín se hace eco del programa de estabilidad que España ha enviado a la Comisión Europea hasta 2013. El documento contempla una vertiginosa reducción del déficit público del 11,4% del PIB que alcanzó en 2009 al 3% en 2013. Y aunque, en efecto, el programa dedica un apartado a detallar las medidas adoptadas para reconducir esos desequilibrios, el BCE no lo estima suficiente. Aunque España no es el único caso: el eurobanco amonesta también a Irlanda por no incluir medidas concretas en sus planes fiscales.

Las medidas expuestas por el Gobierno para corregir los números rojos se centran principalmente en las novedades de este año. Entre ellas figuran las subidas fiscales (retirada de la deducción de 400 euros en el IRPF, aumento del IVA y de la tributación sobre el capital) y las medidas de austeridad, que fijan un recorte inicial del gasto del 4% en los Presupuestos de 2010, al que se suma el plan de acción inmediata para este mismo año, que contempla un recorte de 5.000 millones de euros.

Entre 2011 y 2013, el programa de estabilidad también fija algunas medidas. La más concreta es la retirada de la deducción por vivienda a partir del año próximo y otros objetivos menos explícitos, como la reducción del 4% en la partida destinada a pagar a los funcionarios. Las dudas sobre la consecución de este objetivo han generado precisamente una de las rectificaciones más sonadas del Gobierno, que en un principio consideró acertado revisar las subidas salariales pactadas con los sindicatos para los próximos años y más tarde dio marcha atrás.

Además de las advertencias para España e Irlanda, el boletín del BCE dejó alguna que otra sorpresa. La entidad que preside Jean-Claude Trichet considera que la recuperación sigue siendo "incierta" por las razones habituales: el crédito no se recupera, persiste la incertidumbre y la salida de la crisis se ha ralentizado en países como Alemania. Pero hay más. El BCE considera que las desfavorables condiciones meteorológicas en el primer trimestre de 2010 en parte de la zona del euro influirán negativamente.

"Los indicadores sugieren que la reactivación de la zona del euro está en curso, si bien es probable que se produzca de forma irregular. En concreto, influyen una serie de factores especiales, entre los que se incluyen las desfavorables condiciones meteorológicas", según el informe.