_
_
_
_
_

El Banco de España pide a las entidades que adecúen su negocio a la escasez de liquidez

Íñigo de Barrón

Al menos, nadie podrá decir que no se le ha avisado. Y no una vez, sino muchas. Para algunos ya es tarde, pero lo cierto es que el Banco de España lleva varios años advirtiendo al sector financiero de que volcarse en la construcción traería problemas. A la caída del ladrillo se ha añadido la crisis de financiación y los problemas se han multiplicado.

Ayer, el subgobernador del Banco de España, José Viñals, recomendó a bancos y cajas que desarrollen "ejercicios de estrés y planes de contingencia" para prepararse "ante distintas situaciones de los mercados, incluso en caso de funcionamiento tan anómalo como el actual". Durante su participación en los VIII Encuentros Financieros Internacionales de Caja Madrid, el número dos del Banco de España mencionó hasta 11 veces la palabra liquidez. También les recomendó que hicieran hincapié "en la conveniencia de mantener un colchón de activos líquidos apropiado para hacer frente a situaciones de estrés".

El mensaje, tal y como lo entendieron ejecutivos presentes en las jornadas, es que las entidades deben adecuar el crédito a la falta de financiación que viven los mercados internacionales. Viñals dijo que "el repentino estrechamiento de estos mercados en los últimos 12 meses, si bien ha encontrado a las entidades con adecuados márgenes de liquidez, ha hecho necesario que se gestione en un entorno más exigente". La respuesta de bancos y cajas ha sido captar depósitos y pedir financiación al Banco Central Europeo.

Pero no son soluciones definitivas (ninguna lo es hasta que se abran los mercados), por lo que el futuro no es halagüeño. El Banco de España no cree que la financiación vuelva a ser tan barata como antes "ni a plazos tan largos".

Por eso, Viñals pidió sin ambages que "las entidades se replanteen las condiciones de equilibrio financiero de su actividad, y que adapten sus planes de negocio teniendo en cuenta la presión sobre los márgenes y los beneficios derivada de la subida de tipos". A continuación, bajó más al terreno y dijo que "es decisiva la batalla por la eficiencia" y que tras "la expansión del negocio en el pasado, resulta prioritario el control de costes y la racionalización de procesos y estructuras".

Viñals también advirtió de que la morosidad "va a seguir aumentando, por lo que el mantenimiento de unos niveles prudentes de cobertura desempeña un papel fundamental a la hora de poder afrontar esta evolución con confianza". No obstante, mostró su confianza "plena y justificada en las cajas y bancos".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Íñigo de Barrón
Es corresponsal financiero de EL PAÍS y lleva casi dos décadas cubriendo la evolución del sistema bancario y las crisis que lo han transformado. Es autor de El hundimiento de la banca y en su cuenta de Twitter afirma que "saber de economía hace más fuertes a los ciudadanos". Antes trabajó en Expansión, Actualidad Económica, Europa Press y Deia.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_