_
_
_
_
_

British Airways y Qantas rompen las negociaciones para su fusión

La decisión allana el camino para la unión entre la aerolínea británica e Iberia, que se dispara en Bolsa

La propuesta de fusión entre la aerolínea australiana Qantas y la británica British Airways ha fracasado después de que ambas compañías no llegaran a un acuerdo sobre aspectos claves de la operación. "Pese a los potenciales beneficios a largo plazo previstos para Qantas y British Airways, no hemos sido capaces de llegar ahora a un consenso", ha anunciado hoy la empresa australiana.

Aunque no está directamente implicada en la operación, la cancelación de las negociaciones afecta a Iberia, inmersa a su vez en un proceso de fusión con la británica. De hecho, el presidente de la compañía española, Fernando Conte, aseguró entonces que la culminación de los dos acuerdos podría convertirse en una operación "muy compleja". Además, el hecho de que BA llevara dos negociaciones paralelas tampoco gustaba al Gobierno australiano.

A partir de ahora, British Airways ha asegurado que las conversaciones con Iberia seguirán "al mismo ritmo" aunque, han añadido, no se esperan cambios". Así, tal y como han reseñado esta mañana en fuentes de British Airways, la dirección de la aerolínea "sigue trabajando para lograr una conclusión exitosa" de los contactos con Iberia, con la que ya operan numerosas rutas conjuntamente, aunque no han dado pistas sobre plazos pese a admitir que "están prolongándose más tiempo" del que esperaban.

Más información
British Airways tensa la fusión con Iberia al cortejar a la australiana Qantas
Poligamia en el aire

Por su parte, los coqueteos de BA con Qantas venían de lejos (fue accionista de la australiana hasta hace cuatro años y operan en código compartido una treintena de rutas), pero las conversaciones para una fusión comenzaron más en serio el pasado agosto, según un portavoz de la británica.

Condiciones

Desde un principio, los rumores de la unión de BA con la antípoda (que al igual que la española tuvo como pretendiente al fondo estadounidense TPG) han sido recurrentes, pero los rígidos condicionantes sobre la propiedad de la australiana han obstaculizado la operación a pesar de la voluntad del Gobierno de Camberra de modificar el marco regulativo para propiciar el acuerdo. Entre ellas, Qantas exigía ciertas ventajas y la condición de cotizar en Bolsa de forma separada.

A pesar del fracaso de las negociaciones, las dos aerolíneas implicadas seguirán trabajando juntas en rutas entre Australia y el Reino Unido como miembros de la alianza One World, a la que también pertenece la española Iberia. De haber prosperado la operación, hubiera dado lugar a la mayor aerolínea del mundo por destinos y segunda por número de aviones, valorada en más de 5.000 millones de dólares.

El anuncio no ha sentado bien a los inversores, que han provocado una caída en las acciones de British Airways del 3,9% en la Bolsa de Londres tras llegar a ceder un 5% en la apertura. Cincuenta minutos después de la apertura del parqué londinense, los títulos de la aerolínea británica cotizaban a 165,3 peniques, un descenso de 6,30 peniques con respecto al cierre del miércoles. Sin embargo, la noticia ha disparado las acciones de Iberia en torno al 5%, con lo que a las doce cotizaba a 1,93 euros.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_