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Buffett ganó 63 millones en 2010 y solo pagó 6,9 millones en impuestos

El multimillonario publica su declaración de la renta para defender que los más ricos paguen más

Warren Buffett, el tercer hombre más rico del mundo según la revista Forbes, ganó el año pasado casi 63 millones de dólares pero apenas pagó 6,9 millones de dólares en impuestos, según divulgó el propio filántropo para defender su plan de aumentar el gravamen sobre las rentas más altas de EE UU.

El congresista republicano Tim Huelskamp ha publicado una carta en la que Buffett le desglosó su declaración de la renta, de la que el multimillonario asegura que logró reducir su base imponible en 23 millones de dólares gracias a sus contribuciones benéficas y porque gran parte de sus ingresos provienen de inversiones. Buffett detalló en la misiva que en 2010 ingresó 62.855.038 dólares, pero sólo pagó 6.923.494 dólares en impuestos, el 17,4 % de su base imponible de 39.814.784 dólares, y otros 15.300 dólares en retenciones sobre su salario base.

"Muchos de los más ricos están pagando porcentajes incluso más bajos que el mío"

El presidente del grupo Berkshire Hathaway expresó a Huelskamp que le gustaría que algunos de sus colegas más ricos, como el consejero delegado de News Corporation, Rupert Murdoch, siguieran su ejemplo y revelaran sus declaraciones. "Claramente muchos de los más ricos están pagando porcentajes incluso más bajos que el mío y obtener sus registros sería útil para que nuestros legisladores pudieran construir una ley fiscal más equitativa", ha opinado Buffett.

El filántropo publicó el pasado 15 de agosto un editorial en diario The New York Times en el que pidió que Estados Unidos deje de "mimar" con exenciones fiscales a los más acaudalados y propuso aumentar los impuestos a multimillonarios como él. El presidente, Barack Obama, ha anunciado que pretende gravar las rentas de aquellos que ganen más de un millón de dólares al año.

Buffett cree que el actual sistema, que permite clasificar la rentabilidad de las inversiones como intereses devengados de las mismas, es un agravio comparativo contra los trabajadores asalariados en EEUU, donde el 80 % de la recaudación fiscal proviene de tasas sobre las nóminas de los empleados.

El conocido como Oráculo de Omaha propone elevar el gravamen sobre las bases imponibles superiores al millón de dólares, incluyendo dividendos y ganancias de capital, y mayores impuestos aún para aquellos ciudadanos que ganan más de diez millones de dólares al año.

Warren Buffett, en septiembre de 2010 en Nueva York.
Warren Buffett, en septiembre de 2010 en Nueva York.LUCAS JACKSON (REUTERS)

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