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10 años después del proceso 1001 a la dirección de CC OO

Hoy se cumplen 10 años del célebre proceso 1001 contra dirigentes de la Coordinadora Nacional de Comisiones Obreras. Para esta central sindical aquel proceso es parte fundamental de su historia y pieza clave de su desarrollo posterior. Pero al mismo tiempo, supuso un paso importante en la confluencia de personalidades y sectores de muy diversa naturaleza política e ideológica en la lucha por la libertad y la democracia. Por tanto, es también parte de la historia de España. El secretario general de CC OO, uno de los principales encartados en el proceso, da ahora su visión del 1001.

Este proceso se desarrollaba en un momento en el que en nuestro país y en el mundo el crecimiento económico se agotaba y entrábamos en la perspectiva de la crisis.En este contexto, CC OO era la principal, casi la única, fuerza sindical y democrática de los trabajadores. Actuábamos como movimiento sindical organizado, pluralista y unitario, de carácter sociopolítico, de clase y de masas, democrático e independiente, que unía a partir de la defensa de las reivindicaciones inmediatas de los trabajadores, la lucha por las libertades sindicales y democráticas; sobre la marcha nos autoorganizábamos; defendíamos el presente y conquistábamos el futuro.

En este cuadro se reúne la coordinadora nacional de CC OO en Pozuelo. Ahí llega la detención y después el proceso, cuyo décimo aniversario celebramos.

El proceso en sí era el fiel reflejo de lo anterior, e incluso en nuestra defensa habíamos querido que no sólo hombres prestigiosos sino todo el espectro político de la oposición pudiera participar.

Todo ello, conjuntamente con afinidades y amistades de valiosos hombres y mujeres de la abogacía; unas grandes movilizaciones a nivel nacional y a nivel mundial se realizan en torno a la preparación de¡ proceso, que debían de haber culminado el mismo día de su celebración con una amplia movilización nacional, que no pudo ser al coincidir el comienzo de este proceso con el día que mataron a Carrero Blanco.

Tres etapas

Hoy podemos hablar desde los hechos pasados, desde la historia, y definir tres etapas en este movimiento sindical al que se juzgaba y condenaba a 162 años de prisión a 10 militantes -a algunos de ellos, a 20 años- los días 20, 21 y 22 de diciembre de 1973. Una primera, que va desde su nacimiento a finales de los años cincuenta, hasta el primer congreso constitutivo de Comisiones Obreras en junio de 1978; una segunda, desde esa fecha hasta nuestros días, etapa de consolidación en un país en crisis cuando hay una batalla conjunta en el cuadro de otra más permanente, para reducirnos, si no pueden liquidarnos, a la mínima expresión, en la que intervienen los acuerdos CEOE-UGT, el Estatuto de los Trabajadores, el AMI y las elecciones sindicales 1981-1982. Vientos de fronda originados en las proximidades a CC OO nos crean situaciones internas, a veces difíciles. De cualquier manera, CC OO defiende bien su unidad, su pluralismo y su independencia. CC OO, como demuestran las últimas elecciones de 1981 y 1982, no solamente mantiene las posiciones que tenía anteriormente en el movimiento obrero, sino que las mejora ligeramente. La tercera etapa es la que se abre a partir de ahora con una nueva situación, el PSOE en el Gobierno, con una configuración determinada de las fuerzas políticas, y en este cuadro, con un peso específico de CC OO. Ahí se sitúa nuestra posición en el momento "del cambio posible al cambio necesario", de la presión y negociación para ello, de las importantes y equilibradas movilizaciones de los últimos tiempos. De la afiliación de miles de militantes. También de la claridad de nuestros objetivos.

Repetimos lo que decíamos en nuestro consejo confederal de marzo de 1982, al citar el X congreso de la CGIL italiana: "Nosotros cultivamos la ambición, a buen derecho, de ser en esta sociedad un sujeto político, portador de necesidades e intereses colectivos, que en plena autonomía despliega su potencialidad e intervención cada día, en el campo de la vida social y política. Pero sepamos también que somos un sindicato, y que pretendemos seguir como tal y por eso nos es extraña toda concepción totalizante de nuestro papel. A la vez, consideramos propia la concepción constitucional de la primacía de los partidos y de las instituciones políticas democráticas en lo político, lo que no excluye sino que presupone y exige el pluralismo de la aportación de las organizaciones sociales y culturales". En esta etapa que se está abriendo en los dos últimos meses, constatamos la integración de varios sindicatos autónomos en CC OO; también de importantes núcleos del CSUT y SU; es decir, en los dos extremos del arco sindical que conjuntamente con los miles de afiliados vienen por primera vez o vuelven a CC OO. En las elecciones sindicales, en unas empresas como la General Motors, la Bazán de Cartagena y de El Ferrol, o la FASA Renault de Palencia entre otras, CC OO avanza en las elecciones sindicales.

Los congresos de CC OO del País Valenciano, de Barcelona, de Madrid, de la Federación de Banca y de otros sindicatos, nos permiten constatar que en CC OO se han introducido con entera naturalidad el pluralismo y la unidad, que, juntamente con el sistema de representación proporcional integral que aplicamos, nos afirman como la organización más pluralista, más unitaria: más independiente y más representativa.

Esto es lo que constatamos hoy cuando nos proponemos avanzar resueltamente en la vía de la unidad de acción y de la unidad sindical de los trabajadores, algo deteriorada en el último período.

Finalmente, queremos recordar a los que faltan, a los que desaparecieron en este período, y muy especialmente al compañero Juanín, uno de los 10 del 1001, uno de los mejores de CC OO, muerto en accidente. Queremos recordar y saludar también a todos los que desde no importa qué país, no importa desde qué horizonte dentro y fuera de nuestras fronteras, nos han apoyado siempre. Diez años después, CC OO sigue teniendo sentido de clase, de responsabilidad nacional, y también de solidaridad internacional.

es secretario general de Comisiones Obreras.

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