El Círculo de Empresarios pide a los políticos que revisen la prestación por desempleo
El Círculo de Empresarios pidió ayer que el Gobierno electo en los próximos comicios acometa un plan de choque porque "España se encuentra en algo parecido a una economía de guerra". Entre las recetas de los empresarios se encuentra la petición de revisar la prestación por desempleo. El presidente del Círculo de Empresarios, Claudio Boada, aseguró que no se refieren tanto a una reducción de la cuantía, como al control de las personas que se encuentran cobrando el paro busquen activamente trabajo y no rechacen ofertas.
Además de la revisión de la prestación, el programa de propuestas del Círculo para los políticos con vistas a las próximas elecciones generales se centra en la consolidación fiscal, la reforma laboral y la normalización del crédito. Unas herramientas que deben ser aplicadas como "medidas de urgencia" por el próximo Gobierno, según Boada.
Otro de los puntos que solicitan los empresarios es la reducción de "forma drástica" de transferencias y subvenciones que perciben los agentes sociales y los partidos políticos. Por el contrario, piden un aumento de las tasas universitarias.
Respecto a la Administración pública, el Círculo subraya la importancia de contener el gasto mediante un replanteamiento en su estructura. Para recortar costes, también solicitan una disminución del número de empresas públicas, la congelación de la oferta de empleo público y el control de la contratación de los eventuales interinos. El plan del Círculo de Empresarios contempla un "drástico proceso de consolidación y reforma presupuestaria" que garantice que España cumplirá con el objetivo de déficit. Una meta que en opinión del Círculo se conseguirá con un recorte de gasto. El ajuste presupuestario está cifrado en 30.000 millones de euros como mínimo para 2012 y un "ajuste añadido" de otros 15.000 millones de euros para 2013.
En la negociación colectiva, el Círculo apuesta por suprimir la ultraactividad (que los convenios mantengan su vigencia mientras no se negocie uno nuevo) y vincular los salarios a la productividad y no a la inflación.
