Confianza en mínimos históricos

Los inversores continúan sin saber bien a qué atenerse respecto del sector financiero español que, si bien no presenta problemas importantes, cuenta con todo tipo de soluciones a todos los niveles. La reacción lógica ante situación tan incomprensible es la de poner en venta los títulos de los valores financieros, con lo que los vendedores a corto siguen haciendo su particular agosto.

El Ibex 35 llegó a rozar el nivel de los 7.400 puntos en esta sesión, aunque después se recuperó ligeramente para cerrar en 7.483,40 puntos, con un descenso del 0,76%. Los valores medianos del mercado español cedieron el 0,90% y los pequeños el 0,60%.

Las noticias que llegaban al mercado no eran, precisamente, las que querían oír los inversores, aunque sirvieron para aclarar que la confianza es el principal problema de fondo. En Alemania se conoció el índice IFO de confianza empresarial de este mes de febrero, que cayó a su nivel mínimo histórico, al igual que la confianza de los consumidores estadounidenses para ese mismo mes. Algunos observadores relacionaban estos datos con la tardanza de los planes de rescate en hacerse efectivos, lo cual coincidía plenamente con el análisis del presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Ben Bernanke, en el que condicionaba cualquier posibilidad de recuperación a la capacidad estabilizadora de las medidas adoptadas por el Gobierno.

Todo el mundo parece convencido de que el problema está en la puesta en marcha de unas medidas que hasta ahora se han movido en el plano teórico.

Los valores financieros españoles han vuelto a capitanear los recortes en el mercado español, aunque las empresas más relacionadas con el tejido industrial empiezan a ser objeto de un discreto abandono al considerar los inversores que su situación a medio plazo no va a mejorar en absoluto.

En esta sesión se vivió una relativa tranquilidad en los mercados de deuda y en los del petróleo, en los que los precios mostraban pequeñas variaciones en contraste con la volatilidad de los días anteriores.

La contratación en el Mercado Continuo ascendió hasta 2.830,44 millones de euros, de los que 2.205,47 millones de euros procedían de las operaciones del "mercado abierto", en el que volvían a destacar los grandes valores.