La Policía registra la sede de Deustche Telekom por el espionaje a altos cargos
La empresa contrató a una agencia de detectives para controlar las filatraciones a la prensa en 2000
Deutsche Telekom está viendo como aumentan sus problemas en relación al caso de espionaje de altos cargos para controlar sus comunicaciones con la prensa. Después de conocerse a primera hora del día que el operador alemán y una de las mayores empresas de Europa inició en 2000 la vigilancia a sus empleados, la cúpula de la compañía se ha almorzado con el registro de su sede central por parte de miembros de la Fiscalía de Bonn y de la Policía alemana.
Según revela hoy el rotativo Financial Times Deutschland, Deustche Telekom ordenó el espionaje de periodistas y de empleados sospechosos de filtrar informaciones a los medios ya en al año 2000, casi un lustro antes de lo que se conocía hasta ahora.
El diario añade que el espionaje tuvo entonces un alcance mayor aún que el que se produjo a partir del año 2005, ya que no se limitó a escuchas de las llamadas telefónicas de los periodistas o empleados de Telekom sospechosos.
Agrega que Deutsche Telekom llegó en el año 2000 a contratar los servicios de la agencia de detectives berlinesa Desa, fundada por antiguos miembros de los servicios secretos, con el fin de buscar una presunta filtración en la empresa.
La operación de espionaje, en la que se llegaron a usar ilegalmente cámaras ocultas de vídeo, se dirigió entonces contra el reportero jefe de Financial Times Deutschland Tasso Enzweiler, que en aquella época publicaba con frecuencia informaciones exclusivas y confidencales sobre Telekom.
Las informaciones recabadas por el periódico económico alemán revelan que Deutsche Telekom tejió durante años una red de chivatos y espías que actuaban contra periodistas y altos cargos de la empresa sospechosos de filtrar información confidencial.
Pinchazos telefónicos
El pasado fin de semana, la mayor empresa alemana de telefonía reconoció haber pinchado las llamadas telefónicas de varios periodistas y altos directivos de la propia firma, lo que atenta contra la legislación vigente.
El periódico señala que en ambos casos, tanto en 2000 como en 2005 y 2006, se desconoce aún quién dio en la cúpula del grupo las órdenes concretas para realizar las operaciones de espionaje y hasta que punto estaba informado de ello el departamento de seguridad de Telekom.
La orden de espionaje de 2000 fue realizada por Harald Steininger, un técnico que posteriormente llegó a ser director del consejo de seguridad de Telekom cuando presidía la compañía Ron Sommer.
En el caso del espionaje realizado en 2005 y 2006, un antiguo mánager de Telekom declara en el periódico que los datos recabados por la agencia de detectives Berliner Network Deutschland GmbH tuvieron que ir a parar sin duda alguna a la mesa del entonces presidente del grupo Kai-Uwe Ricke y el antiguo jefe del consejo de control Klaus Zumwinkel.
