España bate el récord europeo en número de viviendas en relación a la población

No hay país en Europa que tenga más viviendas que España, en relación a su población. Suman 510 por cada mil habitantes. La mayor dotación de viviendas se explica en buena parte por la explosión de las segundas residencias, que se da también, aunque menos, en los países vecinos del Sur, con particular tradición turística. En España, una de cada cinco familias tiene una segunda vivienda, y hay que contar también con el tirón que la entrada en el euro ha provocado en la demanda extranjera de residencias no principales, según un estudio de la Fundación de Cajas de Ahorros (Funcas). Es otra de las claves del boom de la vivienda, cuyo precio equivale ya a más de nueve veces el salario anual.

El aumento de la renta real de los hogares españoles, por una parte, y la demanda procedente de los no residentes (ya sean turistas o emigrantes españoles en el extranjero), por la otra, estarían tras el peso "significativo" de la segunda residencia en el total del parque de viviendas en España.

Este peso de las viviendas no principales ha convertido al parque español de viviendas en el mayor de Europa en relación al número de habitantes. Así se explicita en uno de los trabajos del último número de Papeles de Economía, editado por Funcas.

La dotación total de viviendas en España por cada mil habitantes supera la media europea en 42 viviendas (suma 510 unidades, frente a la media europea de 468,4). Y por esos mismos mil habitantes, en España existen 160 segundas residencias, más del doble que la media de los principales países europeos.

La demanda de los españoles que han adquirido una vivienda no principal -para su disfrute personal o como inversión- aumentará, pronostica Funcas, a medida que la renta de las familias continúe escalando posiciones. La renta per cápita española ha pasado de ser el 94% de la media de la UE en 1990 al 98,8% en 2005, y el Gobierno cree que podrá desbancar a países como Italia en tres años. E incluso a Francia y Alemania en seis.

Tampoco parece desfallecer la demanda extranjera de viviendas en España. La previsión del estudio de Funcas sobre dicha demanda, de ahora al año 2011, es nada menos que una media anual de 100.000 viviendas. Los turistas extranjeros que pasan periodos en España en viviendas de propiedad o cedidas han pasado de suponer un 13% del total (en 1997) a representar ya un 22%.

Cataluña, Baleares, Canarias y Valencia son las comunidades con mayor proporción de viviendas secundarias por su tradición turística. Pero el estudio llama la atención sobre el peso que éstas tienen en otras comunidades con menores flujos turísticos como las dos Castillas y Extremadura. Lo atribuye a que buena parte de dichos no residentes con casa en España son españoles que residen fuera (1,27 millones).

Otro de los aspectos en los que incide el informe es hasta qué punto el aumento del precio de la vivienda ha reducido la capacidad de acceso a ella por parte de los nuevos hogares, teniendo en cuenta que el valor medio de un piso usado se ha multiplicado por 3,23 veces, hasta situar el metro cuadrado en 1.841 euros, de media, a finales de 2005, según TINSA. En 2006, el precio de la vivienda es ya más de nueve veces el salario anual.

La demanda persiste

Pero la demanda persiste -este año se estima en más de 700.000 viviendas-, por la creación de nuevos hogares, que de promedio para los próximos años se auguran en 600.000. Aquí juegan su papel los inmigrantes, que tienden a pasar del alquiler a la compra. Y una encuesta de Funcas a 1.509 ciudadanos revela que esperan aún que los pisos se revaloricen cada año un 23,4% en la próxima década.

Hoy, una familia media española (con 1,45 salarios) dedica apenas un 30% de su renta a comprar un piso de 90 metros cuadrados. El esfuerzo es mayor, del 45% de los ingresos, en el caso de una familia que depende de un único sueldo (ver gráfico). La posición patrimonial de las familias se considera "muy sólida": la morosidad sigue en niveles mínimos y la deuda supone menos de un 45% del total de activos financieros, según Funcas.