El FMI cree que la crisis empeora y pide más gasto fiscal
El riesgo de una recesión de la economía mundial aumenta mes a mes, según el director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Dominique Strauss-Kahn. Un pronóstico que el organismo traducirá en enero en una nueva revisión a la baja de sus previsiones de crecimiento. "2009 va a ser un año muy difícil", afirmó Strauss-Kahn, que postergó la recuperación a 2010 siempre que los Gobiernos actúen con más contundencia.
El dirigente del FMI participó ayer en Madrid en unas jornadas sobre las relaciones de España con los organismos multilaterales. Y aprovechó el estrado para dar algo más que un toque de atención a los países ricos y emergentes reunidos en el G-20, que hace un mes anunciaron en Washington un esfuerzo coordinado contra la crisis. "Ahora parecen más reacios a aplicar políticas con las que estaban de acuerdo cuando estaban juntos", dijo Strauss-Kahn, quien consideró que la reacción está siendo, hasta ahora, "pequeña, mal inspirada en cuanto a su diseño y dudosa en cuanto a su implantación".
Strauss-Kahn insistió en que el estímulo fiscal para reactivar la economía debe llegar, como poco, al 2% del PIB, un reproche apenas disimulado a la UE, que sólo ha acordado medidas equivalentes al 1,5% del PIB de los Veintisiete. Y reservó un dardo a Alemania, que recela de incrementar el gasto público aún más, pese a partir de unas cuentas públicas en equilibrio: "Algunos no tendrán margen, otros tendrán que hacer un esfuerzo significativamente mayor". Para el director del FMI, "lo más urgente es pisar el acelerador del gasto fiscal".