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La crisis del euro

El Ibex se deja un 6,67% en la semana postelectoral

La posibilidad de cambios en la participación privada del fondo de rescate europeo anima a los inversores. -La rentabilidad exigida a los bonos del Tesoro a dos, tres y cinco años marca máximos de la era euro

El mal resultado que ha tenido hoy Italia en una subasta de deuda a 6 meses y dos años ha reavivado las dudas en una semana para olvidar en los mercados financieros. Por su culpa, se han prorrogado las ventas sobre la deuda española, pese a que el BCE estaría de nuevo comprando los títulos del Tesoro. En la renta variable, no obstante, tras las fuertes caídas registradas en las Bolsas por la mañana, la noticia revelada por Reuters de que se está planteando la posibilidad de eliminar la incorporación obligatoria del sector privado en el fondo de rescate ha frenado los descensos, aunque no ha sido suficiente para que el español Ibex 35 cierra la semana postelectoral con un descenso del 6,67%. También ha ayudado a animar a los inversores la apertura en verde de Wall Street.

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Al cierre, el selectivo español Ibex 35 ha logrado subir un 0,54% con lo que el lunes abrirá en 7.763 enteros tras llegar a caer un 1,5% por la mañana, con lo que ha tocado fondo en los 7.604 puntos. El principal índice de la Bolsa española no bajaba a estos niveles desde marzo de 2009, cuando el país atravesaba la peor fase de la Gran Recesión. En la semana, el descenso alcanza el 6,67% y, desde enero, se va al 22%, con lo que no es descartable que vuelve a tantear sus mínimos anuales a partir del lunes. En cuanto al resto de parqués de referencia, las plazas que más han recuperado han sido París y Fráncfort, que han subido un 1,23% y un 1,19%. Milán, sin embargo, se ha tenido que conformar un 0,12%. Al otro lado del Atlántico, el Dow Jones de Nueva York subía otro exiguo 0,18% al final de la sesión en Europa.

En las divisas, el euro ha reaccionado al pinchazo en la subasta de Italia aumentado su deterioro frente al dólar, con lo que ha caído hasta las 1,32 unidades del billete verde frente a los 1,33 de ayer. Con este depreciación ha tocado su nivel más bajo en lo que va de mes.

Donde no ha habido cambio de tendencia ha sido en la deuda. Las dudas de los inversores sobre una pronta salida a la crisis han obligado al Tesoro italiano a duplicar la rentabilidad que paga por sus letras con vencimiento en abril y a multiplicar por cuatro el interés de sus bonos, lo que no se ha traducido en una mayor demanda. Aunque ha logrado alcanzar el objetivo máximo de la operación al vender 10.000 millones, los precios de récord y el menor apetito de los operadores constatan que las turbulencias arrecian. Sobre todo, después de las dificultades que encontró Alemania el martes para colocar su deuda. Tal y como ha reconocido hoy el comisario europeo de Economía y vicepresidente de la Comisión, Olli Rehn, la crisis ya está llamando a las puertas del "corazón" de Europa.

Para España, el reavivamiento de las dudas ha prorrogado las ventas sobre todos los tramos de la deuda española, lo que ha impulsado a récords los tipos a los que cotizan los bonos del Tesoro a dos, tres y cinco años en el secundario, que es donde se intercambian los títulos de deuda soberana una vez emitidos. Y eso pese a que el BCE, según informa Bloomberg citando fuentes del mercado, estaría comprando bonos españoles para tratar de evitar que sus intereses se disparen.

Por primera vez desde la entrada de España en el euro, en realidad por primera vez desde 1997, los bonos a dos años han superado en el mercado secundario el 6% (ha tocado un pico en el 6,123%). En el caso de la deuda a cinco, su interés se ha ido al 6,45%, aunque ha acabado la sesión ligeramente más bajo. Mientras, a tres años, el tipo de estos títulos ha llegado a situarse en el 6,295%. Todos estos puntos porcentuales y decimales representan, en esencia, que la desconfianza sobre la deuda del Tesoro aumenta por el incremento de las incertidumbres sobre el conjunto de la eurozona. Por el lado contrario, está teniendo nulo o escaso impacto el próximo cambio de Gobierno y la llegada del PP al poder tras las elecciones de hace una semana, en las que Mariano Rajoy obtuvo mayoría absoluta.

El repunte de la rentabilidad exigida a los bonos, sin embargo, no se ha dejado notar en términos de prima de riesgo porque los inversores han mantenido por tercera jornada consecutiva las ventas sobre los bonos de Alemania, lo que ha ayudado a mantener el diferencial con España bajo control. En concreto, el interés exigido a los bonos alemanes ha marcado a media sesión su nivel más alto desde agosto con un 2,28%, con lo que ya superan a los de Reino Unido.

Pese a que el interés de los títulos con vencimiento en 2021 que cotizan en el mercado secundario ha subido al 6,69%, la prima de riesgo de España, que es el diferencial entre estos bonos frente a los alemanes, de referencia por su pretendida estabilidad, ha acabado la jornada en los mismos niveles que ayer (443 puntos básicos). Por su parte, sí se ha reducido el sobreprecio exigido a la deuda francesa a 10 años, que ha bajado en 10 puntos hasta los 142.

Quien no ha podido evitar el repunte en su prima de riesgo ha sido Italia, cuya prima ha acabado el día en 499 puntos básicos, ocho más que en la víspera. Bélgica también ha visto como empeoraba su situación y su diferencial sobre la deuda alemana a 10 años superaba por primera vez los 360 puntos básicos. La rentabilidad de sus títulos a este plazo se acercaba, además, al 6%. Al cierre, la agencia de calificación de riesgos Standard & Poor's ha anunciado un recorte de su nota de solvencia, que en cualquier caso sigue en un nivel calificado como bueno para la inversión, al pasar de AA+ a AA.

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