Nicaragua amenaza con intervenir la eléctrica Unión Fenosa

El presidente nicaragüense, Daniel Ortega, ha amenazado con intervenir la empresa española, Unión Fenosa, que señaló como un "fracaso y enorme problema", si no cumple con sus labores de normalización del servicio eléctrico y soluciona el problema de los apagones. La compañía española aseguró en un comunicado que mantiene la decisión de invertir y permanecer en Nicaragua, donde señala que en seis años ha invertido 65 millones de dólares.

Nuevo susto para las empresas españolas en Latinoamérica. Tras la nacionalización del sector de hidrocarburos en Bolivia (que ha afectado de lleno a Repsol) y la de los sectores estratégicos en Venezuela (que toca marginalmente a Telefónica) ahora es Nicaragua la que carga contra una empresa española.

Nicaragua sufre una crisis energética que provoca apagones, en algunos sectores durante más de ocho horas diarias, y el Gobierno del izquierdista Daniel Ortega mantiene un duro enfrentamiento con Unión Fenosa, que adquirió en el año 2000 el monopolio de distribución de energía en una privatización. Sin embargo, la crisis energética se remonta a 2002 debido al incremento de los precios de los combustibles.

El Gobierno nicaragüense demanda a la eléctrica española la realización de inversiones para mejorar la distribución, que afirma que no ha cumplido, mientras que la empresa protesta porque no se le permite subir las tarifas pese a un alza en los costes energéticos.

Ortega, que siempre ha sido crítico con las privatizaciones, señaló que Nicaragua tiene solucionado el problema energético, en lo que a la generación de la electricidad se refiere, por la vía hidroeléctrica y geotérmica. Sin embargo, reconoció que "estamos en un momento difícil porque hemos hecho esfuerzos por negociar con Unión Fenosa pero no cumple".

"No nos van a dejar más camino que la intervención, porque tenemos la responsabilidad de garantizar la energía al pueblo nicaragüense", dijo Ortega, que no especificó en qué podría consistir la intervención ni cuánto tiempo podría durar, aunque indicó que estaba haciendo esfuerzos todavía "por agotar la negociación".

La empresa española también se enfrenta a un arbitraje, tras ser demandada por el Estado ante el ente regulador por incumplimiento de contrato al no garantizar el servicio de electricidad que compra a generadoras privadas y estatales la energía eléctrica, así como por falta de inversión en el ramo para ampliar y modernizar la cobertura.

El pasado martes Ortega ya realizó una advertencia a Unión Fenosa, e incluso, aseguró que su Gobierno tenía planes de emergencia y que estaba preparado para asumir las funciones de la distribución de energía en el país, si la empresa española decidía abandonar Nicaragua debido a la tensión existente con el actual Gobierno. El mandatario nicaragüense afirmó que Cuba y Venezuela están haciendo grandes esfuerzos para que en Nicaragua no haya más racionamientos energéticos.

Daniel Ortega, aliado y amigo de Fidel Castro y Hugo Chávez, también informó de que el Gobierno cubano enviará 32 plantas de emergencia para suplir 60 megavatios de energía, las cuales se sumarían a otras 36 plantas con similar capacidad que envió Venezuela para aminorar la crisis de falta de electricidad.Por su parte, Unión Fenosa manifestó el miércoles en un comunicado que mantiene la decisión de invertir y permanecer en Nicaragua. La compañía española señaló que en seis años había inyectado al sistema 65 millones de dólares y que desde que asumieron la distribución de energía, el número de personas que acceden a este recurso ascendió desde los 400.000 a los 600.000 usuarios. "Reiteramos nuestro compromiso de continuar invirtiendo en el país y nuestra voluntad de permanencia en Nicaragua", afirmó la eléctrica.