Sacyr negocia contra el reloj la venta de títulos de Repsol para refinanciar la deuda

La partida está en todo su apogeo. El grupo constructor y de servicios Sacyr mantuvo ayer una nueva reunión con los 38 bancos a los que solicitó hace cinco años 4.900 millones de euros para comprar el 20,01% de Repsol. La reunión se celebró con tintes de urgencia. El crédito vence mañana miércoles, el acuerdo para refinanciarlo no está sellado y Sacyr no ha cerrado todavía la anunciada venta de parte del paquete de acciones de Repsol (hasta el 10%) que podría aliviar su carga. A precios de mercado (los títulos cerraron ayer a 22,17 euros), la mitad del paquete que controla Sacyr en Repsol vale 2.200 millones. Según Efe, el 85% de los bancos estarían dispuestos a ampliar a 2015 el plazo del crédito.

En este contexto de urgencia, Repsol, afectada por la situación del que todavía es su primer accionista, analizó el domingo diferentes escenarios. Lo hizo en una reunión extraordinaria del Consejo del que solo ha trascendido que examinó diferentes escenarios en los que se mueve la negociación de Sacyr con bancos y posibles compradores. "Seguimos atentamente el proceso de negociación a la espera de que culminen las negociaciones", declaró un portavoz de la petrolera.

Los contactos más avanzados para la posible venta de acciones de la constructora en Repsol han incluido a la china Sinopec y a otro grupo latinoamericano del que no se han dado detalles. Según las fuentes consultadas ayer, la opción china había decaído. Así, a 48 horas de que venza el multimillonario crédito, todas las opciones están abiertas. Incluso las que atribuyen posibles acciones salvadoras a la propia Repsol o a la mexicana Pemex, con la que el expresidente de Sacyr, Luis del Rivero, cerró un acuerdo aún vigente para sindicar acciones.