UBS acepta delatar a clientes con cuentas opacas en EE UU
El banco pagará 600 millones por un caso de fraude fiscal
UBS, el mayor banco suizo, ha pactado pagar 780 millones de dólares (algo más de 600 millones de euros) y desvelar el nombre de algunos titulares de cuentas opacas para evitar ser imputado por las autoridades de EE UU bajo la acusación de ayudar a miles de adinerados estadounidenses a evadir impuestos.
El Departamento de Justicia estadounidense acusó a UBS de esconder a Hacienda las cuentas de 17.000 estadounidenses. Estados Unidos retirará los cargos en 18 meses si el banco corrige sus prácticas, coopera con las autoridades y paga la cifra pactada. UBS facilitó de inmediato los nombres de unos 250 clientes, según fuentes familiarizadas con el asunto, aunque está pendiente de determinar a cuántos clientes delatará finalmente.
El presidente suizo dice que el secreto bancario seguirá intacto en el país
Sólo unas horas después del acuerdo, el Gobierno estadounidense lanzó una nueva ofensiva y presentó una demanda contra UBS para intentar forzar que el banco desvele la identidad de 52.000 clientes con cuentas secretas en Suiza utilizadas para no pagar impuestos, según un comunicado del Departamento de Justicia estadounidense.
Pero tan sólo con los 250 primeros nombres, EE UU rasga el velo del proverbial secreto bancario suizo. La agencia tributaria estadounidense ha solicitado los nombres de todos los titulares de cuentas desde julio, pero ha encontrado resistencia por parte del Gobierno suizo.
Pese a su implicación directa, el banco se justificó: "La confidencialidad de los clientes, con la que UBS sigue comprometido, nunca fue diseñada para proteger actos fraudulentos o la identidad de los clientes que, con la ayuda activa de personal del banco, usaron indebidamente la protección por confidencialidad". El propio presidente de Suiza, Hans Rudolf Merz, aseguró ayer que el secreto bancario seguirá intacto en el país porque "ésa es la voluntad del Gobierno helvético". Merz matizó que el sector bancario "no protege a los defraudadores".
Los 780 millones que pagará UBS son una cifra inferior a la que se había estimado previamente, de más de 1.000 millones. El Gobierno accedió a rebajar la cifra dada la delicada situación financiera del banco, según una fuente al tanto de la situación. La Comisión Europea se apresuró a asegurar que espera que si un miembro de la UE solicita a Suiza colaboración en materia fiscal, la respuesta sea similar, señaló la portavoz comunitaria de Fiscalidad, Maria Assimakopoulou.
