La UE planea gravar más las retribuciones de los altos ejecutivos
Los países del euro consideran escandalosos algunos incentivos
La Unión Europea propondrá una serie de medidas para luchar contra los incentivos de los altos ejecutivos, que el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, calificó de "escandalosos" y de verdadero "azote social". El asunto fue discutido en la reunión del Eurogrupo de anteayer y se acordó debatirlo en una próxima reunión del Ecofin (ministros de Economía de la UE), durante la presidencia francesa, a partir de julio.
Entre esas medidas figuran gravar fiscalmente las primas, los bonos, las opciones sobre acciones y los llamados paracaídas dorados de algunos contratos blindados de directivos que están exentos de tributación en muchos países y que se contabilizan como gastos empresariales.
El debate sobre los sueldos de los altos ejecutivos, con subidas de más del 40% en 2007, en países como Francia, está creando un fuerte malestar social y deja en una posición muy incómoda a las autoridades. En la conferencia de prensa tras la reunión de los 15 países del euro, Juncker manifestó: "Corremos el riesgo de no ser comprendidos por los ciudadanos si continuamente hacemos llamamientos a la moderación salarial sin decir que algunos ejecutivos reciben salarios excesivos".
El comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Joaquín Almunia, lamentó que muchos Estados miembros no siguieran las recomendaciones de la Comisión Europea en 2004 para mejorar el control sobre las retribuciones. "Se trata", dijo, "de transparencia, de buen gobierno, de que los comités de remuneración y las juntas de accionistas ejerzan sus competencias".
El comisario se refirió a un informe del Foro de Estabilidad Financiera, dependiente del G-7, que alerta de "los efectos perversos que a veces se han establecido en ciertas remuneraciones, que crecen cuando [el directivo] ha fracasado en la gestión".
