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La bahía de Cádiz parará contra Delphi

El comité laboral denuncia el traslado de maquinaria subvencionada a la planta de Polonia

La bahía de Cádiz se paralizará el jueves en protesta por el anuncio de Delphi Automotive España del cierre de su planta de Puerto Real (Cádiz). El comité de empresa de la factoría acordó ayer con el Ayuntamiento de Puerto Real poner a disposición de los ciudadanos 34 autobuses y dos trenes que llevarán a los que lo deseen a Cádiz, donde está convocada una manifestación. A esa protesta han anunciado su asistencia personas de toda la bahía, ya que el anuncio de Delphi tiene una importante repercusión en la industria auxiliar y en general en la economía de la zona.

Comercios, bares y pequeños negocios de Puerto Real, ciudad de 38.354 habitantes, ya han anunciado que cerrarán durante la mañana para asistir a una protesta que se espera multitudinaria.

No sólo acudirán los trabajadores afectados y los vecinos de Puerto Real. También se manifestarán ciudadanos de toda la Bahía de Cádiz, a quienes amenaza el cierre de la empresa de automoción. De hecho, sólo el 23% de la plantilla vive en Puerto Real, de donde partirán 16 autobuses. El resto saldrá de San Fernando (7), Chiclana (5), Rota (4) y Sanlúcar (2). Además, un tren con 1.280 plazas circulará entre Puerto Real y Cádiz, y el servicio de cercanías se reforzará con un tren Jerez-Cádiz de 960 plazas.

A la protesta acudirá una representación de las plantillas de Navantia y de Airbus, dos de las industrias más importantes de la Bahía de Cádiz. El Sindicato de Estudiantes ha anunciado también una huelga para mañana, con lo que las aulas de los Institutos de Secundaria y de la Universidad quedarán vacías.

El comité de empresa de Delphi ha agradecido el apoyo recibido de toda la sociedad gaditana ante un cierre que, según denuncian, responde a un proceso de deslocalización y no a problemas financieros de la factoría, como alega la empresa. Izquierda Unida se sumó ayer a esta acusación. La coalición exigió a la Consejería de Economía y Hacienda de la Junta de Andalucía una auditoría de la planta que esclarezca si parte de los bienes que la empresa consiguió con subvenciones públicas se han desviado a factorías de la compañía en el extranjero.

El presidente del comité de empresa de la factoría puertorrealeña, Antonio Pina, asegura que los 150 millones de euros de pérdidas que la compañía achaca a la planta son en realidad desviaciones a otras factorías del grupo. "Hemos elaborado un dossier con información de la empresa que demuestra que parte de este dinero se ha marchado a plantas de Polonia y de India", mantiene Pina, quien ha entregado este informe al presidente andaluz, Manuel Chaves, quien recibió ayer el apoyo del presidente del Gobierno, Rodríguez Zapatero, a cuantas acciones realice la Junta de Andalucía para resolver el conflicto.

Entre los "fraudes" apuntados por el comité de empresa destaca el envío de maquinaria a Polonia. El presidente del comité citó los elementos destinados a la fabricación de direcciones EPS, un producto desarrollado en Puerto Real y que se envió a Polonia. O la maquinaria para los amortiguadores S4300, que también fue trasladada al extranjero. Según Antonio Pina, estos instrumentos salieron de la factoría con la justificación de que ya no eran competitivos. Sin embargo, ahora se están utilizando en otros países.

Además del traslado de maquinaria, Izquierda Unida sostuvo ayer que la empresa ha cargado costes administrativos que corresponden a todo el grupo y que, sin embargo, sólo asume Puerto Real, cuyo coste salarial sobre producto es del 8%.

Una mujer y una niña, en la concentración de trabajadores de Delphi en Puerto Real.
Una mujer y una niña, en la concentración de trabajadores de Delphi en Puerto Real.JARO MUÑOZ

MIGUEL GONZÁLEZ: "Luchamos por 100.000 parados"

"Tenemos que luchar para ser más competitivos. No con mano de obra barata, sino con calidad y formación". Es la apuesta de Miguel González Saucedo, presidente de la Confederación de Empresarios de Cádiz, contra las reconversiones y cierres de empresas que castigan a la provincia: más calidad frente a los sueldos baratos de otros países que, dice González Saucedo, están afectando a la economía gaditana. "Hay que reaccionar para dejar de perder empleo. El cierre de Delphi no sólo repercute en su plantilla, sino en todo el empleo indirecto que genera". Por eso, recuerda, "no basta con que venga la Junta de Andalucía con una varita mágica a ofrecer ayudas a los empleados de Delphi: no luchamos por 1.600 puestos, sino por los 100.000 parados de Cádiz". Con todo, el presidente de los empresarios reconoce que las soluciones no son fáciles. "La economía global no está en un buen momento, y cuando EE UU estornuda, nosotros nos resfriamos. El mercado se ha vuelto muy competitivo por la globalización". "En Delphi se pierden 1.600 empleos, pero hay una regla que dice que por cada uno se perderán otros tres indirectos".

MANUEL GARCÍA: "Pensar en los niños y las hipotecas"

Hace ocho años que Manuel García trabaja en Mecasur, una empresa de mecanizados que trabaja para Delphi. Desde que la pasada semana supo del anuncio de cierre de la empresa de componentes automovilísticos vive con "incertidumbre" y con un ojo puesto en lo que ocurre en la multinacional. El 20% de la producción de su empresa, de 50 trabajadores, se destina a la planta de Puerto Real. Para colmo, el resto de la producción también la asume Delphi, aunque en otras plantas como la de México. "No creemos que vayamos a cerrar por esto, pero desde luego ya hemos perdido la esperanza de ganar nuevos contratos". Mecasur se instaló en la Bahía hace 12 años, precisamente, por la existencia de una factoría de Delphi. Con su cierre perdería un importante cliente. "Aquí todos somos gente joven, la plantilla tiene una media de 30 años. Todos pensamos en los niños y en la hipoteca. Yo tengo una hija, y mucho miedo", explica Manuel García, quien asegura que en Mecasur ya veían venir el declive de la empresa: "Había productos que ya no nos pedían, pero que teníamos que enviar a plantas de Delphi de Polonia".

JUAN CARLOS QUIRÓS: "No sabemos si cobraremos el mes"

Juan Carlos Quirós es mecánico y trabaja en Delphi desde hace 18 años. Pero desde el pasado jueves, además, se ha convertido en psicólogo: "Tienes que serlo un poco para que los niños no se den cuenta de que pasa algo". Dice que le cuesta disimular ante sus hijos, de cinco y nueve años, sobre todo, cuando le preguntan por qué la gente sale a la calle a protestar, por qué llevan pegatinas. Él y su mujer llevan varias noches sin dormir. "La incertidumbre es total, no sabemos cuánto tiempo va a durar esto, ni si vamos a cobrar el mes que viene". De todas formas, sí reconocen que el conflicto va a durar mucho, aunque no es lo que más le preocupa: "No defendemos la nómina de un mes, sino el empleo de una vida, nuestro y de los demás. Si Delphi cierra, Cádiz se va a morir". Un mensaje que han comprendido sus vecinos: "Nos tranquiliza saber que no estamos solos, comerciantes, estudiantes, todos se han unido a nosotros. Incluso los políticos, a su manera, claro", señala Quirós, quien espera que la manifestación de mañana sea multitudinaria. "A todo el que le pregunto me dice que va a ir a Cádiz a apoyarnos", concluye.

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