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La crisis elevará el paro al 20% en España, la mayor tasa de la OCDE

El club de los países más desarrollados precisa que la economía española ha superado ya la fase más aguda del deterioro del mercado laboral

Antonio Jiménez Barca

España rozará el 20% de paro en diciembre del año que viene. El informe anual de la OCDE sobre el empleo, presentado ayer en París, es pesimista con la evolución del mercado laboral en los países desarrollados. Pero en el caso de España va más allá. Es simplemente desolador: la crisis se llevará por delante el trabajo de 2.700.000 personas.

A finales de 2010, según las previsiones de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), este conjunto de países tendrá una tasa de paro del 9,9% (cuatro décimas más que ahora). En España se doblará esa tasa, con un 19,8%, la más alta de todo este conjunto de países desarrollados. Sólo Irlanda, con un 15,1%, se le acercará algo. En tercer lugar se situará Alemania, con un 11,8%.

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Con todo, el informe de la OCDE -el club que agrupa a los países más desarrollados del mundo- precisa que la fase más aguda de destrucción de empleo ya ha pasado para los trabajadores españoles. Ocurrió en el último semestre de 2008 y en el primero de 2009. Es decir: el paro, que ahora se sitúa en un 17,9%, seguirá engordando durante todo el año que viene pero no a la frenética velocidad que lo ha hecho hasta ahora.

Las demás economías desarrolladas, mejor situadas que la española para salir de la crisis, también verán cómo se incrementa su tasa de paro. Los expertos de la OCDE recuerdan que la recién comenzada (y aún tímida) remontada mundial descubierta en EE UU, Francia y Alemania no bastará para torcer la inercia a la baja del desempleo. Es más, en Alemania, Francia e Italia, el paro engordará en 2010 a un ritmo mayor que en 2009.

"La recuperación está a la vista [...], pero como hemos aprendido de otras crisis, el repunte del empleo sólo llegará después", resumió el mexicano Ángel Gurría, secretario general de la organización.

España y su tenebroso panorama en cuanto al paro se convirtió en la protagonista de la presentación de este informe. Todos los expertos recordaron un dato clave: más del 85% de los empleos destruidos en España corresponden a trabajadores que tenían contratos temporales. Muchos de ellos, en la construcción. Muchos de ellos, jóvenes e inmigrantes.

Sobre los primeros, el informe de la OCDE recuerda que en España uno de cada tres jóvenes se encuentra ahora desempleado. Gurría alertó de este fenómeno, y aunque no se refería sólo a España, aseguró que se corre el riesgo de alumbrar una auténtica "generación perdida".

En el caso de los inmigrantes, el estudio señala que, en la actualidad, el 28% de ellos se encuentran en el paro en España. "La presencia de inmigrantes en el sector de la construcción, en hoteles y en restaurantes se debe, en parte, a que los contratos temporales son mayoría en estos ámbitos", reza el texto.

La OCDE celebra el impacto "moderado" del Fondo de Intervención Local del Gobierno, que ha creado 400.000 empleos. De no ser por él, la destrucción de empleo habría sido mayor en España. Pero destacó particularmente los efectos benéficos de los planes de estímulo económico llevados a cabo por Japón, EE UU y Australia.

La vicepresidenta económica, Elena Salgado, al comentar el estudio, destacó en Madrid que España es uno de los países que, en porcentaje, más recursos detrae de su PIB para la protección de parados. Según el informe, España dobla la media del conjunto de países miembros del club en este aspecto. Cristina Narbona, embajadora de España ante este organismo, comentó ayer que este dato se debe a que, en primer lugar, España cuenta con muchos parados y a que la tasa de cobertura alcanza el 70%.

Gurría, al referirse a España, aseguró que es "un caso especial". Para el mexicano resultará vital que modifique su sistema de producción para no fiar buena parte de su economía en la construcción o en el turismo, los pilares españoles por tradición.

John P. Martin, director del área de empleo y asuntos sociales, recalcó, por su parte, que España debe reorganizar su sistema laboral y "reequilibrar" los dos tipos opuestos de contratos que ahora coexisten: por un lado contratos fijos muy "rígidos" y por el otro, contratos temporales con muy poca protección para el trabajador. Dicho de otra forma, la OCDE incidió en la necesidad de reformar el mercado laboral. "Yo sé que el Gobierno español busca un consenso. Y no es fácil llegar a eso en tiempos de crisis. Pero en cuanto la economía española remonte, deberá hacerse", añadió.

Los autores del informe recalaron en la "movilidad" de los trabajadores españoles. Cargaron así contra un cliché clásico del mercado laboral hispano. Contra lo que se asegura, la movilidad ha sido intensa en los últimos años, protagonizada, eso sí, por trabajadores con contratos temporales que se desplazaban para aquí o para allá saltando de un empleo precario a otro igual. "Esa movilidad no servía para crear una carrera laboral", precisó Stefano Scarpetta, economista de la OCDE experto en políticas de empleo.

La cifras españolas

- La tasa de paro puede situarse cerca del 20% en 2010, lo que supondrá un aumento del paro en 2,7 millones de personas desde que empezó la crisis.

- Desde finales de 2007, el número de parados ha aumentado en 2,2 millones.

- Uno de cada cuatro jóvenes españoles menores de 25 años no tenía empleo a finales de 2008. Es la tasa más alta de la OCDE, cuya media era del 12,5%.

- El aumento del paro en España es el mayor de la OCDE, al subir 9,3 puntos porcentuales.

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Sobre la firma

Antonio Jiménez Barca
Es reportero de EL PAÍS y escritor. Fue corresponsal en París, Lisboa y São Paulo. También subdirector de Fin de semana. Ha escrito dos novelas, 'Deudas pendientes' (Premio Novela Negra de Gijón), y 'La botella del náufrago', y un libro de no ficción ('Así fue la dictadura'), firmado junto a su compañero y amigo Pablo Ordaz.

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