_
_
_
_
_

El mercado mundial de la energía apuesta por Brasil

British Petroleum y el grupo Cosan anuncian inversiones millonarias

Juan Arias

Las grandes empresas mundiales apuestan cada día más por Brasil, con los ojos puestos en el potencial enorme de un país en pleno desarrollo y con posibilidades inmensas. El gigante de la energía británica British Petroleum (BP) y el grupo privado brasileño Cosan, uno de las mayores productores y vendedores de azúcar del mundo, han anunciado inversiones en varias empresas brasileñas.

BP entró ayer en el mundo del biocombustible de Brasil con la compra del 50% del productor de biocombustibles brasileño Tropical Bioenergía. Asimismo, dijo también que invertiría 1.000 millones de dólares en dos nuevas plantas de etanol en Brasil. Tropical es propiedad de los grupos brasileños Santelisa Vale, productor de azúcar y etanol, y Maeda, que actúa en las áreas de algodón, soja, maíz y aceites. Ambos tendrán una participación del 25%. Tropical está construyendo una refinería de etanol con una capacidad de 435 millones de litros al año en el Estado de Goiás, en el centroeste de Brasil, y planea otra planta en el futuro.

Por su parte, Cosan anunció también ayer la compra de los negocios de distribución y comercialización de combustibles y lubricantes en Brasil de la multinacional estadouidense Exxon Mobil por 826 millones de dólares. ExxonMobil operaba en Brasil bajo la marca Esso.

Según datos del Sindicato Nacional de Empresas Distribuidoras de Combustibles y Lubrificantes (Sindicon), Esso es la quinta en el mercado nacional de distribución de combustibles. "Es vital asegurar un canal de distribución para nuestro etanol", dijo el vicepresidente de Cosan, Paulo Diniz. Según fuentes del mercado, la estatal Petrobras podría quedarse con las filiales de Esso fuera de Brasil y la distribuidora, con el mercado interno.

Precisamente ayer, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, criticó duramente a ciertos organismos internacionales contrarios a la producción de biocombustible en Brasil a costa de la producción de alimentos. Según Lula, el aumento del precio de los alimentos se debe a que "los pobres están comiendo más y mejor", y no a la producción de etanol.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_