Sin 'tóxicos' en nuestra banca
La banca española ha tenido una exposición "prácticamente nula a los productos tóxicos". Tampoco está tan apurada en lo que respecta a la liquidez. "El sistema había emitido un elevado volumen de deuda a largo plazo durante los años previos a la crisis, lo que ha supuesto un colchón a la hora de enfrentarse a la actual disfunción de los mercados mayoristas de crédito". Esta solidez del sistema bancario, "es la mejor garantía para el funcionamiento normal de las entidades. En consecuencia, los ciudadanos pueden tener la certeza de que sus ahorros están seguros". En cuanto a los fondos de inversión, "la gestión de las entidades españolas ha sido conservadora, como lo demuestra que, al contrario de lo que ha ocurrido en otros países, las gestoras españolas no han sufrido problemas significativos de liquidez". José Antonio Álvarez no tiene mala opinión de los productos financieros sofisticados, pero reconoce con la experiencia de la actual crisis, que en algunos casos "se ha hecho una pobre evaluación de los riesgos subyacentes". Por eso, "hay que avanzar a nivel internacional en la transparencia y en los sistemas de valoración y en la supervisión de las entidades de crédito". En la situación actual, son bien recibidos los planes de rescate que deben de servir, sobre todo, "para devolver la confianza en el sistema financiero, y en especial, en los bancos, para que puedan seguir desempeñando su actividad con normalidad".
Pero además de planes gubernamentales, para que vuelva al mercado la confianza, se necesita la colaboración de "todas las entidades y organismos implicados en el negocio". Todos tienen que colaborar y poner su granito de arena. "Las entidades financieras recuperando la esencia del negocio bancario, los reguladores mejorando los sistemas de supervisión y control de riesgo. Y las agencias de rating mejorando sus evaluaciones de las entidades y los productos, de manera que puedan anticipar posibles riesgos".
El director de Gestión Financiera del Grupo Santander no considera necesarias medidas adicionales del Gobierno para aumentar las garantías de los depósitos bancarios. En todo caso, que las tome la Unión Europea, cuya Comisión acaba de destacar nuestro sistema de protección de depósitos "como el más sólido de la Eurozona".
