_
_
_
_
_
La primera crisis del euro

La zona euro retoma la recuperación económica en el arranque de 2010

La tasa trimestral del PIB crece un 0,2% entre los meses de enero y marzo, por encima de lo esperado - El INE confirma que España sale de la recesión

Alejandro Bolaños

El invierno había congelado las expectativas sobre la economía europea. Tras salir de la recesión el pasado verano, la zona euro acabó 2009 encallada, con una tasa trimestral de crecimiento del 0% entre octubre y diciembre. En el arranque del año, lluvias y nevadas retrasaron obras en toda Europa: los malos resultados de la construcción amenazaban con neutralizar el débil crecimiento en otras áreas. Es lo que vaticinó el Banco Central Europeo (estancamiento en la zona euro) o el Bundesbank (retroceso en Alemania) para el primer trimestre. Pero los datos fueron esta vez más generosos que las previsiones. Entre enero y marzo, el PIB de la zona euro creció un 0,2% respecto al trimestre anterior, según avanzó ayer Eurostat. La oficina estadística europea anota la misma subida para el conjunto de la Unión Europea.

La industria y los servicios crecen a las mayores tasas en tres años
Europa se ha beneficiado de la mejora en la economía mundial

Los vaticinios más recientes, con buena parte de los datos sectoriales en las manos, ya anticipaban un mínimo crecimiento para la zona euro. La realidad también ha superado estos pronósticos. Hace apenas tres semanas, la Comisión Europea apostaba por un crecimiento del 0,1% en tasa trimestral, que coincidía con la previsión media de una treintena de analistas privados europeos encuestados por la agencia Bloomberg. Los datos avanzados por Eurostat dibujan una recuperación algo más nítida de lo esperado. Pero las tasas de crecimiento en la mayoría de los países son muy escasas, insuficientes aún para aumentar la recaudación por impuestos y empezar así a achicar déficit y deuda pública. Por contraste, Estados Unidos (con una tasa trimestral del 0,8% entre enero y marzo) recupera terreno mucho más rápido.

La evolución del primer trimestre permite a la zona euro y a la UE lograr tasas interanuales de crecimiento por primera vez en esta crisis, con un incremento del 0,5% y del 0,3%, respectivamente, con relación al primer trimestre de 2009.

Alemania, la principal economía europea, volvió a marcar la pauta. La Comisión y el Bundesbank habían previsto un retroceso trimestral del 0,1%, que los datos reales han tornado en un crecimiento del 0,2%. La oficina estadística alemana mantuvo que la economía germana "gana impulso lentamente", una mejora que achacó al buen comportamiento de la industria (reflejado en la inversión en maquinaria y equipamiento) y de las exportaciones. Además, revisó al alza los datos del cuarto trimestre (del 0% trimestral estimado inicialmente al 0,2%). Francia, la segunda economía de la zona euro, tuvo sin embargo un comportamiento más frío de lo esperado, con un crecimiento del 0,1%.

Todo hace indicar -los datos detallados no se conocerán hasta dentro de un par de semanas- que muchas economías europeas, con Alemania a la cabeza, se han visto beneficiadas por el repunte de la economía mundial (sobre todo en los países emergentes) y del comercio internacional. Una circunstancia a la que no es ajena la devaluación del euro, que ha perdido más de un 10% respecto al dólar en lo que va del año. Algunos de los países más zarandeados por los mercados estuvieron también entre los que exhibieron mejores datos. De hecho, Portugal fue el país de la zona euro que más creció entre enero y marzo, con un fulgurante 1% en tasa trimestral. Grecia retrocedió un 0,8%, pero la caída fue de nuevo menor de lo que preveía la Comisión (1%) o un panel de expertos consultado por Reuters (1,4%). Italia obtuvo el mayor crecimiento intertrimestral en cuatro años, con una subida del 0,5%. Y España, el país de la zona euro que más tiempo ha pasado en recesión (siete trimestres), dio fin a esta situación entre enero y marzo con un incremento del 0,1%, tal y como confirmó ayer el Instituto Nacional de Estadística (INE),

En el escueto comunicado que daba fe del avance de resultados del primer trimestre, el INE se limitó a explicar que la tasa interanual sigue aún en terreno negativo (-1,3%). Y apenas apuntó que la moderación respecto al retroceso interanual del cuarto trimestre (-3,1%) "es consecuencia de una contribución menos negativa de la demanda nacional y de la aportación positiva del sector exterior".

El pronóstico de la Comisión también erró con España (había previsto un 0%), pero las diferencias con los datos reales rozan el disparate en otros casos, como el de Eslovaquia (creció un 0,8% en tasa trimestral, cuando Bruselas anticipaba un 0,8%, pero de retroceso) o Estonia (-2,3% real, frente a -0,4% previsto).

Los indicios de que Europa vuelve a crecer se multiplican: en abril, industria y servicios avanzaron a su mayor tasa interanual en tres años, según la estimación de Bruselas, que también destaca la mejora en los índices de confianza. Pero otros datos, igual de reales, obligan a poner en cuarentena cualquier expectativa. Ayer mismo, el mercado laboral británico arrojaba los peores resultados en 15 años, con 2,5 millones de parados. Y más cerca, en el Congreso, el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, admitía que el nuevo ajuste en el gasto llevará a recortar el pronóstico oficial sobre el crecimiento del PIB español.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_