Breda se rinde al Villarreal

Un lujo. Un gusto. Da gozo ver al nuevo Villarreal de Valverde. Al mismo Villarreal de siempre. En un ambiente encendido, ante un rival motivadísimo, revolucionado en exceso y violento en demasiadas ocasiones, el conjunto castellonense demostró que en el fútbol manda el cerebro más que el músculo, la técnica sobre la potencia. Venció el Villarreal porque fue mejor y deja pocas dudas de que estará en el nuevo formato de la UEFA, la Liga Europa.

Un diluvio y la salida intensa del Breda auguraban inquietud. A los cinco minutos escampó y apareció el Villarreal exquisito, el de las mil combinaciones. En una de ellas, se adelantó tras asociarse Rossi y Nilmar. Dos minutos más tarde, fue Diego López el que comprobó lo peligroso del césped. El nuevo portero internacional no pudo retener un remate de cabeza y el balón quedó muerto a los pies de Loran. Dio igual. En un lanzamiento de falta llegó el pequeño Ibagaza y dejó con cara de tontos a los grandotes y cándidos holandeses. Joseba Llorente redondeó la faena.