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Gran Premio de Japón
Columna
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Un mercado muy movido

La movida que se está preparando para la próxima temporada no sólo es de pilotos. La llegada de Alonso a Ferrari ha desbloqueado todo el mercado y se habla ya de cambios importantes. Raikkonen probablemente será piloto de McLaren -aunque Toyota también le quiere-, la escudería japonesa no quiere a ninguno de sus dos pilotos actuales (Trulli y Glock), y Renault se ha decidido por Kubica.

Para Renault era crucial encontrar un buen sustituto de Alonso, porque el acuerdo para no ser sancionados en el Consejo Mundial conllevaba la promesa de no retirar el equipo al menos hasta 2012. La pérdida del asturiano dejaba el equipo en tierra de nadie. Les faltaba un hombre capaz de relanzar la idea de que Renault seguía siendo un equipo puntero. Y Kubica les puede ofrecer el carisma que necesitan, la velocidad, las ganas de ganar y una capacidad de trabajo importante, porque sólo vive para la F-1. Curiosamente, su fichaje por Renault sólo ha sido posible cuando Flavio Briatore ha desaparecido. El polaco no quería incorporarse bajo la dirección del italiano, porque tuvo una muy mala experiencia con él cuando probó el Renault de F-1 tras ganar las World Series. Entonces, Briatore apretó demasiado las clavijas del contrato que le ofreció. Y Kubica reaccionó mal. Afortunadamente para él, Peter Sauber supo valorarle y le rescató para la F-1. Ahora, en Renault va a encontrarse el ambiente que más le conviene. Un equipo volcado con él, que le mimará y le cuidará como a un líder. Porque eso es lo que será. Grosjean parece ser menos maduro incluso que Alguersuari.

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Sin embargo, tan importante como esta movida de pilotos es la que se está produciendo en algunas escuderías. Mercedes está detrás de todas estas operaciones. La marca alemana se está desmarcando de McLaren y es probable que muy pronto acabe vendiendo el 40% de las acciones que posee. El último enfado proviene de que Ron Dennis ha decidido lanzar un coche deportivo de calle totalmente de McLaren, sin que figure Mercedes para nada. McLaren incluso se plantea comprar la sección de motores de BMW para propulsar a sus coches de F-1 y a su nuevo modelo de calle.

Mercedes, por su parte, está cada vez más cerca de comprar el 75% de la escudería Brawn para tener así el control absoluto de un equipo de F-1, algo que nunca ha conseguido en McLaren. En McLaren, los accionistas árabes de Bahrein parecen dispuestos a ampliar su capital con la compra del 40% que posee Mercedes. De esta forma, McLaren tendría un solo propietario y dos accionistas minoritarios, Dennis y Mansour Ojeh, con alrededor de un 15% cada uno.

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