_
_
_
_
_
LIGA | OSASUNA 1 - ESPANYOL 0

Nekounam alumbra a Osasuna

Un Espanyol sin remate sigue cayendo en picado

Hay una luz en Pamplona con acento iraní que guía cada semana a un equipo con pies de barro. Reluce más unas veces que otras pero siempre aparece. Esta vez fue en el tiempo añadido . Solo en el segundo palo, tras un golpeo a balón parado de Puñal, Nekounam avistaba una victoria balsámica que deja al Espanyol tocado. Quizás hundido. No sólo por los puntos, sino por el propio partido. Ni rastro de fútbol durante el encuentro. Miedo a raudales para dos escuadras con el músculo agarrotado. Imprecisiones y pelotazos a espuertas sin rumbo fijo a ninguna portería.

Sólo Dady, que sirvió de faro para el conjunto rojillo, inquietó en alguna ocasión la zaga rival. Juanfran chocaba una y otra vez con su par y Plasil repetía situación en el lado opuesto. Enfrente, el problema era el mismo con otra camiseta. De la Peña era incapaz de eludir a Puñal y surtir de balones a un desaparecido Tamudo, carente de pegada y sobrado de revoluciones. Sólo a media distancia fue capaz de intimidar el Espanyol. Sergio Sánchez y Román probaron fortuna con sendos disparos a media distancia.

OSASUNA 1 - ESPANYOL 0

Osasuna: Roberto; Azpilicueta, Miguel Flaño, Josetxo, Monreal (Javier Flaño, m.87); Juanfran (Masoud, m.64), Puñal, Nekounam, Plasil; Dady (Portillo, m.73) y Pandiani.

Espanyol: Kameni; Chica, Jarque, Nico Pareja, David García; Román, Sergio Sánchez; Luis García (Callejón, m.67), De la Peña (Iván Alonso, m.82), Nené; y Tamudo.

Gol: 1-0, m.92: Nekounam.

Árbitro: David Fernández Borbalán (Comité Andaluz). Amonestó a Josetxo (m.35), Juanfran (m.57), Puñal (m.65), Pandiani (m.69), Masoud (m.84) y Plasil (m.94), de Osasuna, y a David García (m.50), Chica (m.85) y Nené (m.92), del Espanyol.

Incidencias: Encuentro de la vigésima octava jornada de Liga celebrado en el estadio Reyno de Navarra ante 18.887 espectadores, cerca de medio millar seguidores del Espanyol. Se celebró el Día de las Peñas Osasunistas.

Nada hizo el conjunto de Pochettino dentro del área. Sólo Iván Alonso en la segunda parte decidió saltar la verja y adentrarse en territorio inexplorado. La tensión se hacía notar. El balón caía del cielo para Osasuna y sólo a la contra el Espanyol parecía entenderse con él. Ni siquiera el árbitro aparecía en escena para tomar parte en el desenlace. Pero los minutos finales siempre deparan sorpresas para Osasuna, no siempre agradables. Sin capacidad de reacción y estupefacto por lo injusto del varapalo, nada pudo hacer el Espanyol de Pochettino, que ve alejarse además a uno de sus rivales directos.

Jarque y Dady disputan un balón aéreo.
Jarque y Dady disputan un balón aéreo.EFE

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_